La cuesta arriba de Miguel Sebastián

Se supone que está entrenado porque siempre ha sido deportista, pero Miguel Sebastián está echando el resto antes de la verdadera carrera: la campaña electoral de los comicios del próximo 27 de mayo que comienza esta noche.

El candidato socialista a la alcaldía de Madrid no se lo esperaba. Se le ha endurecido un poco el gesto y su sonrisa; al menos la de ayer, no es la que derrochaba días atrás. Parece que Sebastián se ha cabreado. Las acusaciones del PP contra él han conseguido, muy a su pesar, ensuciar sus actos de campaña. Y las preguntas que tiene que responder ahora poco tienen que ver con que quiera "quitar los parquímetros de Fuencarral" o con "poner cinco aparcamientos para residentes en ese barrio", como era lo que correspondía a una convocatoria como la de ayer, en pleno mercadillo callejero de esa zona de Madrid.

Se le vio tenso y por primera vez fue él mismo quien puso fin al turno de preguntas

Sebastián no contaba con que su pasado se iba a hacer presente, y que algunos de los que le acompañaron entonces iban hoy a mirar debajo de su alfombra. Y entonces, apareció Manuel Conthe, resentido tras su reciente dimisión como presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Conthe acusó directamente a Sebastián de haber filtrado en 2005, desde su antiguo puesto de asesor económico del Gobierno, un informe en contra de una empresa del presidente del BBVA, Francisco González. Se trataba de la empresa FG Valores y se trataba también del mismo hombre que años atrás había despedido a Sebastián de su puesto en el banco por defender propuestas contrarias a sus intereses.

Sebastián, aunque permaneció callado y ausente el martes mientras arreciaba el temporal de acusaciones, salió ayer a la palestra y lo negó todo: "No he elaborado ni difundido ningún informe y no voy a participar en la estrategia de mentiras del PP". Lo tuvo que repetir varias veces, ante las reiteradas preguntas de la multitud de periodistas que le esperaba. De hecho, por primera vez, él mismo puso fin al turno de preguntas: "Y gracias por su interés y por venir". Mucha tensión para un escenario de mercadillo, lleno de sujetadores de colores y frutas.

Sebastián, con la sonrisa ya forzada, se dio un paseo por el mercado saludando a la gente y franqueado por casi todo su equipo. Mientras, sus jefes de prensa, repartían copias de una página del diario Expansión de 2005, en las que Conthe defendía todo lo contrario a lo que dice hoy sobre el caso FG: "No ha habido ninguna influencia política, no ha habido presión, me siento totalmente independiente", recogía ese diario.

Lo cierto es que Conthe, siendo presidente de la CNMV, archivó el caso en 2005 tras dos días de investigación. Y el día después de que la Fiscalía Anticorrupción solicitara las pruebas sobre la presunta "manipulación contable" de FG, éstas ardieron junto con el edificio Windsor. Y quedó también archivado.

Ahora Conthe dice digo donde dijo Diego y Sebastián se enfrenta a su peor cuesta arriba en plena campaña electoral. Desde el PP, aparte de "explicaciones convincentes", se le ha pedido a Sebastián que dimita como candidato; le han denunciado en los tribunales por "prevaricación y tráfico de influencias". Ayer la retahíla continuaba: la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, dijo que "el PSOE debía decidir si Sebastián está capacitado para seguir siendo candidato"; Ana Botella, concejal de Empleo, decía: "Es un candidato en entredicho"; el secretario de Comunicación del PP de Madrid, José Güemes, pidió "que asumiera responsabilidades políticas"...

El tiempo dirá si Sebastián, que ayer negó tener ninguna intención de retirarse, es o no un corredor de fondo.

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