Salgado cuestiona la final de Copa en el Bernabéu

En el Madrid nadie quiere hablar del Barcelona. La plantilla se ha hecho con el mensaje de Fabio Capello: "Nos quedan cinco finales y hay que ir jornada por jornada". Todos opinan lo mismo. Todos menos Michel Salgado, que ayer analizó el estado de forma de los azulgrana y criticó que la final de Copa, en la que el Barcelona se perfila como finalista, se juegue en el Santiago Bernabéu el día 23 de junio. "A mí me gustaría estar en esa final, pero no estoy con lo cual no es problema mío, pero lo que no habría que hacer en la vida es ir provocando a la gente. Hay más estadios en los que disputar la final", espetó. Y añadió: "Es como si nosotros fuéramos a jugar una final en el Camp Nou. No sería un mensaje positivo".

Quizás se acuerde Salgado de la imagen que dejó Joan Gaspart, entonces presidente del Barça, en junio de 1997 en el Bernabéu el día de la final de Copa contra el Betis. Bajó al centro del campo besando una bufanda azulgrana para celebrar la victoria. Eso explica el malestar que siente Salgado y de algunas peñas, que dieron un mensaje claro el domingo en Chamartín durante el partido contra el Sevilla. "No en nuestra casa" fue el lema más leído en las pancartas.

Lo que no saben los aficionados es que el Madrid recibirá un millón de euros de la Federación por albergar la final.

Salgado también analizó el periodo de crisis sufrido por los blancos en los últimos meses y el estado de forma de sus adversarios directos. "Nosotros no tenemos ninguna presión, porque ya hemos tocado el fondo. Venimos desde abajo y poco a poco hemos subido hasta arriba. No sé si el Barça nos tiene miedo pero seguro que teniéndonos ahí a dos puntos es mucho más complicado para ellos", explicó. "Los que han estado siempre arriba en la clasificación, como el Barcelona y el Sevilla, son los que ahora jugarán con más presión. Hay que aprovechar esta circunstancia", matizó. "En el vestuario sabemos que es posible que el Barça falle. Nos dimos cuenta después del partido del Camp Nou", manifestó. Quizás por eso piense ya en la visita de los azulgrana al Vicente Calderón, donde no ganan desde la temporada 1999-2000. "Confío en los rojiblancos. Ellos también se juegan mucho", dijo.

Salgado intentó explicar cómo el Madrid sobrevivió a la crisis de los últimos meses y que siga teniendo opciones en la Liga: "Después de todos los palos que nos han metido, llegar donde hemos llegado significa que hemos sido muy fuertes y que hemos aguantado de todo", argumentó. "Cometimos muchos errores, los jugadores, el club, todos. Nos han podido los nervios y superar los momentos complicados nos ha hecho ser más equipo. Reaccionamos a tiempo", matizó. "Y si llegamos a ganar la Liga lo disfrutaremos como nunca. Este equipo necesitaba tiempo, pero parece que en el Madrid nunca puede haber años de transición". Salgado descartó que la mejora del Madrid se deba a un plan especial de trabajo físico. "Se planean las cosas para que la plantilla aguante toda la temporada, no solamente el tramo final. Lo que sí creo es que ahora corremos mejor, nos desgastamos menos y por eso estamos tan bien físicamente".