"La última opción que contemplamos es cerrar fábricas"

Muchos hogares españoles cuentan con electrodomésticos fabricados por Electrolux. Corberó, AEG o Zanussi, además de la marca matriz, son algunas de las enseñas que posee la compañía sueca. Hans Straberg (Suecia, 1957) la dirige desde hace cinco años. En este tiempo ha trabajado para volver a la senda de resultados ascendentes. Electrolux ganó unos 300 millones de euros tras cuatro años de resultados menguantes. Una tendencia que ha continuado en el primer trimestre, al duplicar sus ganancias. Straberg explica, por videoconferencia, la marcha del plan de reducción de costes. Un plan que se ha notado en España: la empresa ha pasado de tener más de 2.500 empleados en 2005 a unos 1.000 en la actualidad.

"Durante estos cinco años nos hemos estado moviendo en la dirección adecuada y eso lo sabemos por nuestros resultados"

"La posición española se hace fuerte en el sector industrial cuando resulta caro transportar los productos desde largas distancias"

Pregunta. Usted es el primer ejecutivo desde 2002. ¿Cómo valora este periodo?

Respuesta. En estos años se ha acelerado el desarrollo de nuestros productos y fortalecido la marca matriz de Electrolux. Hemos trabajado en rebajar los costes de las compras y hacer más eficaces las diferentes partes del grupo. También nos hemos centrado en el crecimiento de nuestros segmentos más rentables y en potenciar la formación de los recursos humanos. Nos hemos movido en la dirección adecuada y eso lo sabemos por nuestros resultados.

P. Tras varios años de resultados menguantes, en 2006 han vuelto a aumentar. ¿Por qué?

R. El incremento en los costes de materias primas ha sido el equivalente a un 150% de nuestro resultado operativo en 2004, que fue de unos 3.800 millones de coronas suecas (415 millones de euros). Y la razón por la que mejoramos el año pasado fue por la estrategia de desarrollo de producto, marketing y todo lo que lleva aparejado.

P. ¿Cómo funciona el plan de reducción de costes?

R. Muy bien. En los últimos cuatro años hemos centralizado las compras y el sistema de fabricación Electrolux está dando un resultado muy bueno. Además, el programa de relocalización de las instalaciones funciona mejor de lo previsto. Pero para Electrolux también es importante lanzar al mercado lo que realmente necesitan los consumidores y fortalecer las marcas.

P. ¿Qué prevén para la compañía en los próximos años?

R. Tendremos un incremento en los costes de material de 2,5 millones de coronas suecas sobre el de 2006. Continuaremos invirtiendo en investigación y marketing. Además, confiamos en la estabilidad del mercado. Y dado todo esto, esperamos obtener mejores resultados que el año pasado.

P. Bancos o eléctricas están desempeñando un papel destacado en fusiones y adquisiciones. ¿Cree que el sector de los electrodomésticos seguirá estos pasos?

R. El sector se ha consolidado durante un largo periodo. Electrolux ha comprado 450 empresas en 35 años. Para nosotros no es nuevo y creo que continuará.

P. Electrolux invierte un 1,7% de su facturación en investigación y desarrollo (I+D).

R. Queremos llegar al 2%. Recientemente estábamos en un 1,7% y hace cinco años, en el 1%. En 2002 no teníamos la oferta de productos que necesitábamos. Hoy, gracias a esta inversión, la tenemos. Aumentaremos el gasto en I+D siempre y cuando obtengamos un buen retorno sobre él.

P. ¿Qué espera del mercado en los próximos años?

R. Crecerá al mismo ritmo que en el pasado. El mercado de Estados Unidos bajará en la mayor parte de este año pero crecerá a finales. La caída no será dramática. Aún está en los niveles de consumo de 2005 si observamos las cifras absolutas. En Latinoamérica creceremos al 20% o 30% este año. En el este de Europa el incremento será mayor que en el oeste por la demanda.

P. ¿Qué hacen para mantener su posición fuerte en el mercado?

R. No sólo mantenemos nuestra posición, la aumentamos, y lo hacemos desde hace tiempo. Además, nosotros nos centramos en los productos y las prestaciones que los consumidores aprecian, también en el marketing. Y por supuesto, mantenemos la eficacia en la gestión de costes.

P. Electrolux ha cerrado varias instalaciones en los últimos años: un ejemplo es Fuenmayor en La Rioja. Cuando la empresa toma estas decisiones ¿perjudica en el mercado local?

R. La última opción es cerrar fábricas. Lo primero que hacemos es analizar la localización de nuestra producción. Observar si tenemos desventajas en los gastos de transporte. Si es así tratamos de acabar con ese problema (como conseguir que se pague más por nuestros productos, desarrollar productos mejores, rebajar los costes...). Y si aun así tenemos una desventaja con nuestros principales competidores, entonces tenemos que tomar una decisión. Fue el caso de Fuenmayor. La fábrica era muy pequeña y no podía competir con los rivales. Además, podíamos competir mejor con otras instalaciones de nuestro grupo. La situación de Alcalá es distinta. Allí nuestra fábrica de lavadoras es muy competitiva.

P. En 10 años su empresa ha aplicado una importante reducción de empleo. ¿Cuándo va a parar?

R. Gran parte de la reducción se debe a que hemos subcontratado ciertos componentes. También nos hemos desecho de la división de motores eléctricos y compresores; y hemos recortado nuestra actividad externa. Así que no creo que veamos la misma reducción en el futuro. Ahora estamos en una posición mucho mejor. Tomando España como ejemplo: ahora tenemos un negocio rentable, una industria rentable conectada con nuestra red europea y mundial, lo que quiere decir que tenemos una buena base de crecimiento y una línea de producción mucho mejor, que se centra en lo que los consumidores necesitan.

P. ¿Puede España competir con países como China o los del este de Europa?

R. Sí, pero depende del producto. Es difícil que algunos productos se fabriquen en Occidente, por eso la industria se ha movido hacia países más lejanos porque los costes de transporte están bajando. La posición española se hace fuerte en Europa cuando resulta caro transportar desde largas distancias a causa de los costes de transporte. Así que depende mucho del tipo de productos y de los costes de transporte. Pero, en mi opinión, España continuará manteniendo una industria muy eficiente.

P. ¿Qué planes tiene para las instalaciones españolas?

R. Continuar creciendo en España y continuar invirtiendo en nuestra industria para mejorar su eficacia.

P. Mientras las empresas deslocalizan sus instalaciones industriales en busca de condiciones laborales más favorables sus directivos aumentan sus salarios. ¿Qué opina al respecto?

R. En las compañías estamos viviendo en un mercado libre, donde la competencia prevalece. Y los propietarios y accionistas son quienes deciden la compensación para la gente que dirige las compañías. Ellos invierten su dinero en las compañías y son los que deciden sobre lo que se paga.

P. ¿Cree que las empresas tienen alguna responsabilidad con las zonas y sus empleados cuando deciden cerrar sus instalaciones?

R. Sí. Nuestra responsabilidad consiste en que las compañías sean rentables. Si no son rentables y quiebran, habrá mucha gente que perderá su trabajo. Cuando la compañía tiene que trasladarse, por supuesto que tenemos la responsabilidad de apoyar a la gente. Para apoyar ese cambio las compañías tienen que ser transparentes.

P. ¿En qué punto se encuentran las negociaciones por las instalaciones de Fuenmayor?

R. Todavía estamos negociando con una compañía y, por supuesto, con el Gobierno regional para lograr una buena solución.