_
_
_
_

La oposición amenaza con boicotear la elección del islamista Abdulá Gül como presidente turco

Juan Carlos Sanz

La oposición laica amenazó ayer con hacer descarrilar la elección del primer presidente islamista en la historia de Turquía. Socialdemócratas y conservadores confirmaron que boicotearán hoy la primera votación parlamentaria para designar como nuevo jefe de Estado para un mandato de siete años a Abdulá Gül, ministro de Exteriores y número dos del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP, en sus siglas turcas), la formación islamista moderada que controla 353 de los 560 escaños del Legislativo.

Su objetivo es forzar la anulación del proceso electoral ante el Tribunal Constitucional -un baluarte del Estado laico- por no reunir el quórum de dos tercios de los diputados que, según sostienen, exige la Carta Magna para la elección presidencial. Los partidos laicos buscan además el adelanto de los comicios legislativos, que sería inexcusable según la Constitución si fracasa la elección presidencial indirecta en el Parlamento.

Con esta estratagema legal, los diputados de la oposición expresan la inquietud en la sociedad turca ante la concentración de poder en manos de un partido islamista. Las organizaciones y partidos laicos han convocado este fin de semana una manifestación en Estambul en defensa de la separación entre religión y Estado en Turquía, donde un 99% de la población es musulmana. El pasado día 14, una marcha similar reunió a más de medio millón de personas en Ankara.

Tras 80 años de dominio casi absoluto de las instituciones, los partidos surgidos del régimen fundado por Mustafá Kemal, Atatürk, se han visto expulsados del Gobierno y arrinconados en el Parlamento por el AKP, que crearon Gül y Recep Tayyip Erdogan, primer ministro, tras apartarse del islamismo ortodoxo y adoptar una línea prooccidental. Con esta estrategia, que les ha valido para acaparar el poder en el Gobierno y el Parlamento, esperan apoderarse de la presidencia de la República, institución con competencias formales de la que se ha servido el aparato kemalista para torpedear sus reformas educativas y el nombramiento de altos cargos afines.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Juan Carlos Sanz
Es el corresponsal para el Magreb. Antes lo fue en Jerusalén durante siete años y, previamente, ejerció como jefe de Internacional. En 20 años como enviado de EL PAÍS ha cubierto conflictos en los Balcanes, Irak y Turquía, entre otros destinos. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Zaragoza y máster en Periodismo por la Autónoma de Madrid.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_