Juncal rechaza una moción contra las obras de la plaza de España

La coalición de gobierno de PP e Independientes por Ferrol se atrincheró ayer en la defensa de la legalidad de la obra de la plaza de España, amparándose en los informes favorables del secretario municipal. El gobierno de Juan Juncal rechazó la moción consensuada por los tres grupos de la oposición -BNG, PSOE e IU-, que exigían la paralización inmediata del edificio que se erige en el centro de este espacio público.

Más de cien vecinos acudieron a un pleno crispado, plagado de pancartas tan críticas como ácidas sobre la situación de la ciudad, en medio de un fuerte dispositivo policial y con las puertas del consistorio cerradas a cal y canto. La coalición de gobierno se atrincheró en la defensa de la legalidad de la obra de la plaza de España, amparándose en los informes favorables del secretario municipal, para rechazar la moción consensuada por los tres grupos de la oposición.

Como si de una obra de teatro se tratase, el último pleno del presente mandato de Juan Juncal al frente del gobierno local de Ferrol se desarrolló ayer en actos con distintos protagonistas y con la urbanización de la Plaza de España y de la fraga de Menáncaro como telón de fondo. En la calle, cerca de 200 personas, repartidas en cinco protestas distintas de diferentes colectivos, sembraron la calle con falsos billetes de 500 euros.

A debate, la moción articulada por la oposición que exigía la paralización inmediata de la construcción de la plaza de España. BNG y PSOE pidieron a Juncal debate y reflexión para no "perseverar" en el enfrentamiento abierto con la Xunta, que requirió en febrero la paralización de una actuación que los responsables del gobierno gallego califican de "ilegal" y "claramente irregular".

El secretario municipal, Leopoldo Moure, intervino en el debate plenario a petición del alcalde, para argumentar jurídicamente la validez de la actuación. Sin embargo, fuentes del consistorio cuestionan la argumentación legal aportada por el funcionario y aseguran que su hijo pasó a formar parte de la plantilla del municipio recientemente.

La ausencia del anterior edil de Urbanismo, el independiente Francisco Pita Romero, responsable de algunos de los proyectos urbanísticos más polémicos de la legislatura y que fue destituido de forma fulminante el pasado mes de julio, propició un doble empate entre gobierno y oposición. Hasta en dos ocasiones, Juan Juncal tuvo que hacer valer su voto de calidad como alcalde para deshacer el empate.

Los vecinos interrumpieron repetidamente el pleno para reclamar la palabra y boicotear las intervenciones del primer teniente de alcalde, Juan Fernández, vinculado a la operación urbanística en Menáncaro. Fernández aseguró ser la "víctima" de una situación orquestada por "células durmientes que obedecen a bastardos intereses" al servicio de fines electorales.