La Generalitat invita a las cajas a financiar proyectos sociales estratégicos para Cataluña
Las 10 cajas de ahorros catalanas son libres de destinar a los proyectos que deseen el 93% de los recursos que invierten en desarrollar Obra Social. El 7% restante se pacta con el Gobierno catalán. La Generalitat quiere dar ahora un giro a los usos que se da al dinero en que se traduce ese 7%. Su idea es implicar a las cajas de ahorro en la financiación de proyectos "de envergadura" y que considera "estratégicos" para Cataluña, con contenido social en un sentido amplio de la palabra.
Un ejemplo de este giro serían grandes programas para fomentar el aprendizaje del inglés, cuya falta de dominio es uno de los problemas que arrastra el sistema educativo. Otro caso sería el de proyectos de impulso a la innovación, la investigación y, sobre todo, la dependencia.
No son ejemplos teóricos. La Federación Catalana de Cajas de Ahorros ya se ha comprometido a destinar 19,44 millones de euros a estos grandes proyectos estratégicos este año, según informó ayer el Departamento de Economía y Finanzas.
Esta cuantía representa el 53,8% del dinero total que las 10 cajas aportarán en 2007 para la Obra Social acordada con la Generalitat, y que asciende a 36,12 millones de euros. Este dinero, que corresponde al mencionado 7% del dinero cuya orientación pactan el sector y la Administración, es el 23,9% superior a los recursos aportados el año pasado por este mismo concepto.
Dinero por tramos
La apuesta por este nuevo tipo de proyectos se plasma en la división del tradicional convenio de colaboración en materia de Obra Social en dos tramos. Los recursos del llamado "tramo A" irán a proyectos concretos que decidirá una nueva comisión en la que estará representada la Generalitat y cada caja. Es decir, que habrá tantas comisiones como cajas de ahorros. Los recursos restantes, los llamados "del tramo B", se distribuirán como se venía haciendo ahora.
En la actualidad, cada caja escoge los proyectos que más entroncan con las prioridades de su propia Obra Social de entre una lista de planes implementados por entidades sin ánimo de lucro que resultan prioritarios para los diferentes departamentos del Gobierno catalán.
Este giro de política es fruto de la propia negociación del convenio, en la que el sector ha visto más útil no continuar troceando el dinero en un amplio abanico de proyectos, sino concentrarlos en grandes iniciativas. El año pasado, en que la Obra Social vinculada al convenio con la Generalitat se llevó 29 millones de euros, el número de proyectos a los que se destinó el dinero sumó 519. De éstos, 56 tenían alguna relación con la atención a la dependencia, y coparon el 35,3% de los recursos totales.
Pero, tras la dependencia, los proyectos que se llevaron más dinero (5,55 millones de euros) en 2006 fueron los que contribuyeron a la promoción de la cultura popular y tradicional catalana: un total de 162.
