Los rectores admiten que "ha habido avances", pero califican la situación de "preocupante"
Los rectores convocaron a los medios de comunicación por separado de la rueda de prensa de la Generalitat. Se mostraban moderadamente satisfechos de la reunión, pero no ahorraron algunas críticas. "Hemos avanzado aunque tenemos problemas y la situación es preocupante", afirmó Antoni Giró, rector de la Politécnica y presidente de la ACUP, el lobby que reúne a las universidades públicas catalanas: Autónoma, Politécnica, Universidad de Barcelona, Pompeu Fabra, Girona, Lleida y Rovira i Virgili.
Giró compareció ante la prensa junto al secretario de la ACUP y rector de la UPF, Josep Joan Moreso, y la vicepresidenta de la ACUP y rectora de la Universidad de Girona, Anna Maria Geli. "Las universidades nos ponemos a disposición [de la Generalitat] para desencallar los temas. Entre todos tenemos que buscar la mejor solución", añadió Giró.
"Hay preocupación por las políticas sobre la universidad y la investigacion. Faltan objetivos claros". remachó Moreso. El rector de la UPF constató que "la dimisión de dos directores generales es un síntoma de que las cosas no acaban de funcionar". Geli señaló que se necesita una planificación y una anticipación" para resolver el desafío de las universidades, sobre todo con el espacio europeo. "Pedimos reforzar la Universidad en esta macroárea", añadió la rectora de la Universidad de Girona.
"El Gobierno debe liderar"
Junto al documento con sus reivindicaciones, los rectores entregaron al consejero una carta de tono crítico. En el documento no figura ninguna mención a las críticas sobre la falta de diálogo con el departamento, pero la crítica consta en la carta. Los rectores afirman en ella que "el departamento se encuentra en una situación de inestabilidad preocupante", tras las dimisiones de los directores generales de Investigación y de Universidades, Xavier Hernández y Joan Anton Ferré, respectivamente. Y añade la carta: "Las universidades necesitan tener una interlocución y liderazgo claro desde el Gobierno (...). "Hay un cierto debilitamiento de la estructura técnica, clave a la hora de gestionar estas políticas y hacerlas operativas".
