Tiroteado un carnicero que se había resistido en un atraco cinco días antes

Un grupo de atracadores decidió tomarse la venganza por su mano y tiroteó al empleado de la carnicería del supermercado Gama del barrio de Mirasierra (Fuencarral-El Pardo), Pedro Municio Sanjuán, de 57 años. Este trabajador se enfrentó a un grupo de asaltantes que irrumpió el pasado sábado en el local. Municio llegó a quitar la máscara a uno de los delincuentes, según los comerciantes de la zona.

Pedro Municio se encontraba dentro de su coche, un Seat León, que estaba aparcado junto a una sucursal bancaria, en el número 2 de la calle de La Masó, cerca de la carretera de Colmenar Viejo (M-607). Sobre las 6.15 se acercó al menos una persona y le descerrajó un disparo desde fuera del vehículo. La bala le entró por el hombro izquierdo y le salió por la axila derecha. El proyectil le quedó alojado en el brazo derecho.

El teléfono de emergencias 112 recibió varias llamadas a partir de las 6.18. Al lugar se desplazó una UVI móvil del Samur-Protección Civil que encontró a la víctima consciente y orientada, según un portavoz de Emergencias Madrid. Tras ser estabilizado, fue trasladado al hospital La Paz, donde fue intervenido por la mañana. Municio estaba anoche en estado muy grave.

Los agentes del Grupo V de Homicidios investigan el tiroteo. La policía encontró junto al coche un casquillo, que será analizado. Los compañeros del herido no quisieron hablar sobre lo ocurrido. Sin embargo, los comerciantes de otros negocios próximos al supermercado destacaron que Pedro Municio es "encantador y muy agradable", que lleva mucho tiempo trabajando en la carnicería del supermercado Gama.

Tres asaltantes

Los afectados enlazaron de inmediato el tiroteo de ayer con el atraco que sufrieron cuatro empleados, entre ellos Municio, el pasado sábado. Tres atracadores, armados con dos pistolas y un machete, irrumpieron en el establecimiento a las 7.40 a través de la puerta de emergencia. Obligaron a un empleado a que abriera la caja fuerte que hay en la oficina, mientras el tercer asaltante vigilaba al resto de trabajadores.

Según los comerciantes, Municio se enfrentó con un asaltante, al que logró quitar una braga militar con la que cubría su cara.

La Jefatura Superior de Policía de Madrid explicó ayer que no existía constancia en la denuncia presentada en comisaría de que la víctima intentara quitar la citada braga al atracador.

Los asaltantes se apoderaron de un ordenador portátil y de las carteras de los empleados. Dos de los empleados sufrieron heridas leves que no precisaron asistencia médica.