Un estudio dice que el cliente prima la calidad ante el precio del calzado

Las importaciones de calzado de China crecen en parte porque buena parte de los fabricantes españoles, muchos de ellos valencianos, fabrican desde Asia para ahorran costes y frenan la pérdida de competitividad de sus productos. Pese a ello, una de las conclusiones de un informe elaborado por el Observatorio de Mercado del Calzado y presentado ayer en la sede de la patronal alicantina Coepa indica que el consumidor empieza a darle menos importancia al precio y más a la calidad o al diseño.

El informe explica que el sector del calzado vive una "desorientación" que ha hecho que muchas empresas estén "totalmente desbordadas por el efecto de la globalización en los mercados". "Ya no es suficiente la intuición y el saber fabricar un buen producto", añade el análisis, que insiste en que la solución pasa por tener más información sobre la evolución de los gustos del consumidor y de los distintos mercados.

En la presentación de ayer, por ejemplo, el presidente del instituto tecnológico del calzado, José María Amat, mencionó que las ventas a países como Suecia o Dinamarca están creciendo porque el consumidor "valora más el producto que es respetuoso con el medio ambiente". Las exportaciones a China también crecen y otros mercados como Turquía se están abriendo a los productos españoles. Los responsables del informe creen que las exportaciones estabilizaran su ritmo de crecimiento tras desplomarse entre 1997 y 2005.