Nuevos atentados golpean barrios chiíes de Bagdad y causan 37 muertos

Treinta y siete personas murieron ayer en varios ataques en Bagdad, que incluyeron la detonación casi simultánea de dos coches-bomba en un concurrido mercado chií y la explosión de dos minibuses. Una de las explosiones de minibuses fue provocada por un suicida que mató a por lo menos ocho personas y causó heridas a 11 más. Mientras, en el norte de la capital, dos soldados británicos perdían la vida al estrellarse dos helicópteros en pleno vuelo. Fuentes del Gobierno británico calificaron el suceso como un mero accidente.

Un total de 521 personas han muerto y otras 1.095 han resultado heridas en atentados en Bagdad desde que entró en vigor el nuevo plan de seguridad para la capital iraquí, el 14 de febrero pasado. Así lo anunció ayer el portavoz oficial del nuevo dispositivo de seguridad, Qasem al Musawi, que se mostró optimista al comparar la cifra con las 1.940 personas que perdieron la vida en los 30 días anteriores a la aplicación del plan.

Por otra parte, el clérigo chií Múqtada al Sáder ordenó ayer a sus seis ministros en el Gobierno iraquí que abandonen sus cargos, en señal de protesta por las detenciones de los líderes de sus milicias del Ejército del Mahdi en el transcurso del plan de seguridad. Los seis ministros harán oficial su dimisión hoy mismo, mientras que los 30 diputados afectos al clérigo seguirán en el Parlamento.