Detenidos 17 'okupas' por robar fluido eléctrico en Castellón

La policía detuvo ayer a 17 okupas en Castellón, acusados de defraudar sobre el fluido eléctrico que suministra Iberdrola, al estar conectados a la red pública. Los arrestados han pasado la noche en comisaría, mientras que, según está previsto, hoy pasarán a disposición judicial. Los okupas tienen entre 20 y 36 años de edad y todos, a excepción de dos (un argentino y un checo), son de nacionalidad española.

La acción de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la Comisaría de Castellón se realizó en cumplimiento de una orden del Juzgado de Instrucción número 2 de Castellón en el que había recaído la denuncia interpuesta por la compañía eléctrica Iberdrola. Los agentes se presentaron en la conocida como "casa Paca", ubicada en la avenida de Vila-real de la capital de La Plana y procedieron al desalojo del inmueble y a la detención de los ocupantes, según fuentes policiales. Las mismas fuentes aseguraron que la operación se realizó "sin ningún tipo de incidente o altercado". Los 17 ocupantes de la vivienda fueron trasladados hasta la comisaría, donde permanecerán hasta que pasen a disposición del juzgado.

Tras la detención, según fuentes policiales, la compañía eléctrica Iberdrola envió a unos operarios que procedieron a desconectar los cables que los ocupas tenían conectados, de forma ilegal, a la red publica, hecho por el que la compañía les acusó de fraude en el fluido eléctrico.

Además, fuentes de la policía nacional explicaron que "los animales de compañía que tienen los detenidos han sido acogidos por los residentes en la casa vecina a la desocupada". En cuanto a los vehículos que se encontraban en el interior del recinto en el que está ubicado el inmueble, dos caravanas y un camión, "han sido igualmente reubicados". Las mismas fuentes indicaron que "los propietarios de la vivienda desalojada están procediendo al tapiado de la misma para evitar nuevas ocupaciones".

Hace exactamente un mes, el Mas de Roquetes, otra casa okupada en Castellón, fue objetivo de un asalto. Cuatro okupas resultaron heridos después de que alrededor de 15 personas, según el testimonio de las víctimas, entraran en la vivienda en la que habitan. En este caso, la policía detuvo a cuatro de los presuntos asaltantes y confiscó una catana de 68 centímetros, dos navajas, una porra extensible, un aerosol de defensa y un pasamontañas negro. Dos horas después, los agentes hubieron de acudir de nuevo al lugar para persuadir a los dueños del inmueble, que se presentaron en el recinto con una retroexcavadora para intentar demoler las instalaciones. El primero de los asaltos se produjo de madrugada mientras que, al día siguiente, los okupas volvieron a denunciar una nueva agresión. En este caso los atacantes utilizaron cócteles mólotov.