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Reportaje:

... Con máscaras antigás en la puerta

Vecinos y empleados escenifican un simulacro de emergencia nuclear frente al centro

Bajo la consigna de "residuos radiactivos fuera de Madrid", varias decenas de empleados y vecinos del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat) marcharon al final de la tarde de ayer hasta la sede de ese instituto, para exigir transparencia frente a las actividades que despliegan en esos laboratorios.

Disfrazados con máscaras antigás, los residentes de Valdezarza, Valdeconejos, Sajonia y otras zonas de los alrededores se reunieron con algunos empleados del organismo, para representar los riesgos y mutaciones que pueden sufrir por vivir o trabajar cerca de una institución nuclear en la que no están seguros de que guardan planes y simulacros de emergencia.

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En nombre de los empleados del instituto, su portavoz, Miguel Yuste, se lamentó de que "como España no tiene un lugar para almacenar los residuos de alta radioactividad, todo termina en el Ciemat".

El portavoz recordó que sólo en febrero de 2006 "apareció plutonio en las instalaciones deportivas". Y añade que ese hecho se trata de una nota al pie en la lista de accidentes y derrames radiactivos de los que tiene noticias.

Los manifestantes por eso insistieron en que las autoridades deben precisar el estado de las instalaciones ubicadas en el campus universitario de Madrid. "No hay ninguna información", sentenció Yuste. "Jamás nadie ha dicho que allí hay sustancias radioactivas".

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En fin para los manifestantes, el Ciemat es una bomba de tiempo ubicada dentro de la capital del país. Pero en las instalaciones, las cosas lucen diferentes. "El plutonio encontrado en la zona deportiva procede de un enterramiento de unos cascotes que se realizó en los años 60, y era ínfimo en todo caso", advirtió el director de Seguridad del organismo, José Luis Díaz.

Reconoció, no obstante, que vertieron 350 metros cúbicos de agua de refrigeración. Aun así insiste en que no hay ningún tipo de riesgo: "Se hicieron en total 24 vertidos entre los años 2003 y 2004 convenientemente diluidos y autorizados por el Consejo de Seguridad Nuclear".

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