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El azulejero Diago, condenado a ocho meses por desobediencia grave

María Fabra

La Audiencia de Castellón ha condenado a Fernando Diago, empresario azulejero y presidente de la patronal cerámica Ascer, a ocho meses de prisión como autor de un delito de desobediencia grave a la autoridad. Diago no tendrá que cumplir la pena de cárcel ya que carece de antecedentes y ésta no excede a los 1,5 años. Al mismo tiempo, la sentencia absuelve al empresario de un delito contra la ordenación del territorio del que se le acusaba por unas obras realizadas en su fábrica. El caso omiso a los requerimientos de paralización de las obras que dictó el entonces concejal de Urbanismo y hoy alcalde de Castellón, Alberto Fabra, es la razón en la que se basa la sentencia para fijar la pena.

Cerámicas Diago amplió en 2000 su fábrica. Al mismo tiempo, construyó un aparcamiento sobre suelo no urbanizable y sin licencia. Estas obras provocaron la protesta de los vecinos y la orden de paralización por parte del Ayuntamiento. Diago, como administrador, hizo caso omiso al primer requerimiento de la empresa y actuó de la misma manera con la segunda advertencia.

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