El impacto de un proyectil obliga a evacuar la embajada en Congo

"Tenemos claro que no iban a por nosotros, pero hemos pasado cinco horas tirados en el suelo, en medio de dos fuegos", relató anoche telefónicamente un funcionario de la Embajada de España en Kinshasa (República Democrática de Congo). Los 21 españoles que se encontraban en el edificio fueron evacuados después de que un proyectil impactara en un muro de la sede diplomática e hiciese un orificio de 50 centímetros.

Tras más de cinco horas tirados en el suelo, oyendo cómo los disparos de armas ligeras rompían los cristales de todas las ventanas del inmueble, cascos azules uruguayos de la Misión de Naciones Unidas para Congo (MONUC), a bordo de tanquetas, evacuaron poco antes de las seis de la tarde a los 17 empleados de la Embajada española en Kinshasa y a otros cuatro del Consulado, sin que hubiera que lamentar daños personales, y los trasladaron hasta una base de la ONU, para pasar la noche.

También el resto de la colonia española, compuesta por un centenar de personas, se encontraba bien, según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores, después de que el embajador en Congo, Miguel Fernández Palacios, conversara con el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos.

La sede diplomática española se encuentra en el centro de la capital, cerca de la residencia del ex vicepresidente y líder rebelde, Jean-Pierre Bemba.

Los combates entre el Ejército regular del presidente Joseph Kabila y los milicianos seguidores de Bemba, derrotado en las elecciones presidenciales el pasado 29 de octubre, estallaron hacia el mediodía y se extendieron por el centro de la ciudad. Otras legaciones diplomáticas, como las de Grecia, Portugal o la Nunciatura Apostólica, también resultaron alcanzadas por el intercambio de disparos, con armas ligeras y pesadas, entre ambos bandos.

Bemba se refugió ayer en la embajada sudafricana, aunque un portavoz explicó que no había pedido asilo, sino que estaba allí de forma temporal, según France Presse. Ante la escalada en las calles de Kinshasa, los miembros de la MONUC evacuaron a 450 civiles -inlcuyendo diplomáticos y sus familias- de sus casas, informa Reuters. Un hotel y varios edificios del centro fueron asaltados.

Anoche no existía un balance de las víctimas provocadas por los combates, pero fuentes diplomáticas contabilizaban la muerte de al menos dos civiles -incluido un empleado del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)- y numerosos heridos. Al igual que el personal de la Embajada de España, 120 alumnos y profesores de la escuela francesa fueron evacuados tras permanecer varias horas bloqueados por el intercambio de disparos.

En el origen de los enfrentamientos está el enésimo ultimátum del Gobierno de Kabila a las milicias de Bemba para que se disuelvan, entreguen las armas y se integren en el Ejército regular, lo que éstos rechazan alegando que temen por su vida.

El Consejo de Seguridad de la ONU hizo un llamamiento al cese inmediato de los combates y expresó su preocupación por el riesgo que un desbordamiento de la violencia supone para la población civil y, en especial, para los niños. También la Comisión Europea llamó a la calma.

La MONUC, que dispone de un contingente de 17.000 cascos azules en todo el país, aseguró haber reforzado su dispositivo militar en el centro de la capital para proteger a la población.