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Los mercados de valores vivieron ayer una sesión anodina en la que las escasas fluctuaciones de los valores respondían a la presencia, o ausencia, momentánea de papel y dinero. Compradores y vendedores estuvieron en todo momento pendientes de la actividad contraria y poco dispuestos a tomar la iniciativa, lo que limitó enormemente las oscilaciones de los índices.

La reunión del comité monetario de la Reserva Federal era una de las razones de peso para justificar esta aparente falta de interés, a pesar de que el consenso apuntaba hacia el mantenimiento de los tipos de interés en Estados Unidos.

El Ibex 35 cedió al final el 0,09% y se mantiene por encima del nivel de los 14.300 puntos, confirmando así la entrada en una fase de movimiento lateral que necesitará de algún argumento de peso para romperse. El Ibex Medium se anotó una ganancia del 0,66% y el Ibex Small Caps subió el 0,09%, lo que sitúa el centro de atención lejos de los grandes valores del mercado.

La agitación del día anterior en el sector bancario apenas tuvo continuidad en esta sesión, muy posiblemente por la ausencia de declaraciones de los responsables bancarios sobre la posibilidad de una puja abierta por el control de ABN Amro que planteaban algunos analistas.

Algo que sí ha cambiado en los últimos días es la valoración objetiva de muchas sociedades, en parte por el recorte que ha sufrido su cotización y el mantenimiento de las expectativas empresariales. El posible acuerdo de "cielos abiertos" entre la UE y Estados Unidos ha favorecido a las acciones de Iberia, aunque el desmentido de la compañía sobre alguna posible oferta enfrió los ánimos de la inversión a corto plazo.

La contratación en el Mercado Continuo se mantuvo casi en el mismo nivel que el día anterior, con 5,717,10 millones de euros.