Ofensiva del PP contra el gobierno de Lugo por los depósitos de tierra en un vertedero sin licencia

El Partido Popular ha lanzado una ofensiva contra el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Lugo, que preside el socialista Xosé Clemente López Orozco, para aclarar la existencia de supuestas irregularidades con el vertido de tierra, procedente de desescombro de obras, en un vertedero que, según los populares, tan sólo disponía de un permiso verbal otorgado por el alcalde y que permitió a una empresa particular facturar unos dos millones de euros.

Ayer mismo el grupo municipal popular, a través de su portavoz Jaime Castiñeira, exigió la comparecencia en pleno del concejal de Medio Ambiente, Lino González Dopeso, para que aclare la situación actual del vertedero. El próximo miércoles, día 28, también comparecerá en el pleno del Parlamento el conselleiro de Medio Ambiente, Manuel Vázquez, para hablar de la situación medioambiental del vertedero, ahora sin actividad, y con los depósitos de tierra. También le preguntarán al conselleiro por las actuaciones que piensa llevar a cabo desde su departamento para conseguir la reposición de la legalidad.

Con anterioridad, el 7 de septiembre de 2006, el Partido Popular trasladó por escrito sus sospechas a la fiscalía de la Audiencia Provincial de Lugo solicitando la apertura de una investigación. Más recientemente, el director general de Urbanismo, Ramón Lueje, informó en una comisión parlamentaria de Ordenación Territorial, en la que compareció a instancia de diputados popular, que abrió un expediente informativo por los vertidos, que, según Castiñeira, puede derivar en dos expedientes más: uno para la reposición de la legalidad y otro sancionador.

El vertedero, que ocupa una extensión de unos 60.000 metros cuadrados, se localiza en el extrarradio de Lugo, en lo que fue un antiguo campo de tiro militar en la zona de San Cibrao. El PP sostiene que nunca dispuso de una autorización formal, no hubo un convenio de la empresa con el Ayuntamiento, ni contó con una declaración de impacto ambiental. Además, Castiñeira sospecha que se depositó algo más que tierra y exigió la realización de catas que permitan determinar si se vertieron materiales contaminantes.

Negocio millonario

El portavoz popular tiene claro que con este vertedero hubo una empresa, la encargada de gestionar los vertidos, que realizó "un negocio millonario". Cuantificó sus ingresos en unos dos millones de euros mediante el cobro de 0,60 euros por cada metro cúbico de tierra que se depositó en la antigua instalación militar durante los 6 años que se destinó a este cometido.

"Se hizo un negocio de millones de euros por parte de un particular y queremos saber exactamente qué es lo que pasó allí con eso; por qué se dio un permiso verbal; por qué se permitió ese negocio y qué tipo de vertidos se depositaron", precisó el portavoz popular en Lugo.

Aunque se trata de un tema que surge con el bipartito PSOE-BNG en el Ayuntamiento de Lugo, el portavoz del grupo municipal popular considera "muy sospechoso" que desde el equipo de gobierno "se eludan responsabilidades dando la callada por respuesta".