Argelia desmonta una red mafiosa que cobraba por visados españoles
La juventud de algunos ejecutivos de Sonatrach, la empresa pública de hidrocarburos argelina, que solicitaban visado para viajar a España acabó por escamar al personal del Consulado de España en Orán. Para colmo, muchos de ellos vivían en una misma calle.
A principios de mes, Luis Tejero, cónsul de España en Orán, denunció en comisaría la entrega por más de un centenar de argelinos solicitantes de visados de documentación falsa con vistas a obtener el preciado documento con el que emigrar a Europa.
La brigada criminal abrió una investigación y a finales de la semana pasada detuvo a cuatro personas, incluida una mujer de 62 años cuyo hijo era el cerebro de la red. El hijo logró huir. Tejero agradeció ayer a la policía de Orán la rapidez y eficacia con la que actuó.
La red no falsificaba visados sino la documentación necesaria para obtenerlos. Elaboraba certificados laborales convirtiendo al solicitante de visado en ejecutivo de Sonatrach o de la compañía aérea Air Algérie, las empresas más conocidas y solventes del país. Proporcionaba también a sus clientes falsos extractos de nóminas y de cuentas corrientes abultadas.
El material incautado por la policía durante una redada (escáner, ordenador, sellos etcétera) servía, junto con un auténtico pasaporte, para preparar el expediente que se presentaba en el Consulado tras rellenar un impreso. A cambio de cada expediente, los delincuentes cobraban a los candidatos a emigrar entre 2.000 y 5.000.
Tan solo una veintena de visado -la sexta parte de los solicitados- habrían sido otorgados a los solicitantes entre septiembre y febrero, según fuentes diplomáticas españolas. La prensa argelina asegura, en cambio, citando fuentes policiales, que el 90% de los que lo pidieron lo obtuvieron. El Consulado español en Orán expide unos 14.000 visados anuales.
La concesión de visados a argelinos ha sido especialmente escrupulosa a finales de 2006 para evitar que se colapsen algunos de los 2.629 terroristas liberados en el marco de la política de reconciliación emprendida por el presidente Buteflika. Argel comunicó, por fin, en diciembre a los europeos la lista completa de los excarcelados.
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