Las Juntas respaldan que Vizcaya participe en el nuevo San Mamés

Las Juntas Generales de Vizcaya autorizaron ayer, con la única abstención del PSE, la operación urbanística de San Mamés y la participación de la Diputación en la sociedad creada para construir el nuevo campo del Athletic, cuyo coste puede rondar los 200 millones de euros. Los socialistas censuraron la escasa "claridad" de la nueva sociedad, en la que se integran el club y la BBK, y la elevada inversión para "una entidad privada".

La elevada inversión que supone el nuevo San Mamés ha obligado al Athletic a recurrir a otras entidades e instituciones que le ayuden en su financiación. El mecanismo elegido, presentado el mes pasado, fue constituir una sociedad patrimonial -llamada San Mamés Barria-formada por el club de fútbol, una entidad financiera (la BBK) y una institución, la Diputación de Vizcaya. Todavía se desconoce la participación accionarial de cada uno y sólo se ha concretado la aportación inicial de 2.000 euros por cada socio. El Ayuntamiento de Bilbao se ha comprometido a unirse a esta sociedad mediante la exención del cobro de las licencias y tasas de construcción. El Gobierno vasco ha rechazado participar mientras el campo no tenga otra utilidad pública.

La entrada de la Diputación en San Mamés Barria llegó ayer a las Juntas Generales de Vizcaya. Los partidos del equipo de gobierno (PNV y EA), el PP y Ezker Batua votaron a favor, mientras que los socialistas se abstuvieron. Josu Montalbán, del PSE, justificó esta postura por las dudas que le suscita el plan de reordenación de la zona -se incluye también el nuevo campus tecnológico de la UPV-, que, destacó, se centra más en ubicar el campo que en reformar este área.

A su juicio, ha faltado "claridad" en la constitución de la sociedad, de la que no se conocen "todos los datos económicos concretos ni cuál va a ser la aportación definitiva de los miembros". Montalbán recordó que los socios del Athletic suponen "el 3% de los ciudadanos de Vizcaya" y advirtió de que se trata de una "inversión cuantiosísima destinada a una entidad privada" que podría, según apuntó, dedicarse a otras cuestiones.

El portavoz del PSE expuso que, aunque la Diputación ha asegurado que el estadio será de utilización exclusiva del Athletic, no se han definido los usos de otras instalaciones, como el museo, tiendas, salas de reuniones, aparcamientos o restaurante.

El diputado foral de Hacienda, José María Iruarrizaga, replicó que la Diputación no otorga ninguna subvención "ni regala terrenos" y que, además del nuevo campo, la pretensión fundamental es la reordenación urbanística del área de San Mamés, que se demostrará "con la importantísima red universitaria". Ezker Batua pidió que las instalaciones tengan "un usufructo lo más amplio posible".