Medio siglo de 'glamour' de cine, a subasta

Medio siglo de glamour cayó a golpe de martillo en la subasta de vestuario de cine y televisión que la casa Bonhams organizó ayer en Londres. La capa que transformó a sir Alec Guinness en Obi Wan Kenobi en las primeras películas de La guerra de las galaxias fue la favorita de la velada, con una puja final de 54.000 libras (unos 78.000 euros). También hubo ropa de Titanic. Por una gorra de esta película se pagaron 1.400 euros.

Hubo, sin embargo, mayor rivalidad para hacerse con los pantalones de tweed, abrigo granate y bufanda de rayas que Tom Baker lució en los años setenta en la serie británica de televisión Doctor Who. Era el lote número 11 y las ininterrumpidas pujas multiplicaron por 12 el valor estimado por los subasteros, para venderse en 35.670 euros. Una vez más, Sean Connery demostró por qué sigue siendo el más popular espía al servicio de su majestad. Una americana que el galán escocés vistió en Thunderball, de 1965, se acercó a los 50.000 euros, el precio más alto pagado ayer por un artículo de James Bond.

Hubo, en cambio, gangas, como un vestido de noche diseñado para Christina Ricci en The man who cried, vendido por 175 euros, o los 310 euros cotizados por un vestido beis que Penélope Cruz se puso en Captain Corelli's mandolin. Los modistas vendieron ayer cerca de 400 lotes, una parte insignificante de su archivo de 1,5 millones de prendas.