"De las oposiciones de Ourense, que opinen los políticos"
El edil del PP y delegado de CC OO asume con naturalidad su doble militancia
José Antonio Blanco, concejal del PP en Esgos -en donde comparte grupo de gobierno con el cuñado y el hijo del presidente provincial, José Luis Baltar- y desde el viernes delegado sindical de Comisiones Obreras en la Diputación de Ourense, asume con naturalidad la dualidad que se le presenta de mantener la fidelidad política y amistad que reconoce hacia el titular de la institución en la que trabaja, el propio Baltar, y defender los derechos de los trabajadores a los que representa bajo las siglas de CC OO.
Blanco, adscrito al servicio de planes provinciales de la diputación, cree que se ha magnificado esta cuestión y sostiene que no hay nada extraño en ello. "Uno puede ser amigo y llevarse muy bien con su jefe, pero ante todo es un trabajador y tendrá que defenderse, ¿no?", razona. Pero la defensa a la que alude Blanco no está, al menos por el momento, encauzada hacia un posible contencioso con su jefe político y laboral, según él mismo pone de manifiesto. "Sí, me llevo muy bien con Baltar, y claro que simpatizo con él", reconoce el edil-sindicalista. "¿Cómo no voy a tener buena relación con él si trabajo en la diputación?", se pregunta.
"Sí, me llevo muy bien con Baltar, y claro que simpatizo con él", afirma Blanco
"CC OO contribuirá a hacer frente a la desaparición de las diputaciones"
Así que sostiene que si aceptó ir en la lista de Comisiones fue "porque nos lo propuso el sindicato a los que estábamos de independientes [en el grupo de trabajadores afín a Baltar], cosa que nunca hicieron UGT, CIG y CSIF". Y Blanco y el grueso del "sindicato del jefe" decidieron hacer el traslado hacia las nuevas siglas y disolver la agrupación, en la que ya representaban abrumadoramente a los empleados para cobijarse bajo el paraguas de CC OO.
Una decisión que no obedece a la existencia de problemas en el organismo provincial, señala, sino para hacer frente al único temor que asegura que tienen los trabajadores, "que puedan desaparecer las diputaciones, aunque supongo que eso finalmente no ocurrirá".
Blanco presume de militancia política en el PP: "Llevo ocho años de concejal en Esgos, antes incluso que el alcalde y el teniente de alcalde", dice en referencia a Manuel Blanco, cuñado de José Luis Baltar, y José Manuel Baltar Blanco, hijo del presidente
respectivamente. Una militancia que cree que en absoluto colisiona con su adscripción a CC OO, "que hace muchos años estaba vinculado al Partido Comunista, pero que ahora es independiente, no como la UGT, que se le ve el plumero con el PSOE". Blanco es consciente de la importancia de la independencia sindical: "Tengo compañeros en el PP que están afiliados a la CIG y esto es algo absolutamente normal".
El delegado sindical sostiene que el presidente provincial no le hizo comentario alguno sobre la disolución de la agrupación que encabezaba y su paso a Comisiones Obreras. "No sé lo que opina el presidente", sostiene, "porque al menos a mí no me hizo ningún comentario, pero para nosotros no es lo mismo estar como funcionarios que por un sindicato, la cosa cambia".
Ahora que ostenta las facultades para afrontar la defensa de los trabajadores de la diputación y que cuenta con el amparo de un sindicato de clase, Blanco elude pronunciarse sobre la polémica de las contrataciones en el organismo provincial en donde, según denuncia de los grupos provinciales de PSdeG y BNG, son más de 300 los empleados vinculados al PP a través de un proceso de oposiciones que ambas formaciones políticas cuestionan. "No, no; sobre eso yo no pienso opinar; ni hablar. Sobre eso que opinen los políticos, que yo a lo que me voy a dedicar es a velar por la defensa de los trabajadores".
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