González Pons tilda la visita de "pachanguera" y los empresarios citan pérdidas millonarias

La entrevista fue un intercambio de impresiones cordial pero franco, dijo el presidente de la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo, Marcin Libicki, a la salida de su entrevista con el consejero de Territorio, Esteban González Pons, y con los promotores y empresarios turísticos. Fueron las únicas declaraciones públicas de la delegación comunitaria.

El consejero, a través de un comunicado, descalificó, sin embargo, el "bajo nivel" de los europarlamentarios y tildó la visita de "pachanguera" e incluso ironizó acerca de chistes aparecidos en la prensa los últimos días sobre eurodiputados tendidos al sol, tomando una Coca-Cola. Los empresarios hablaron de pérdidas millonarias. Atraco, persecución, parcialidad, maltrato, una visita tan cerca de elecciones... González Pons trasladó a la delegación de eurodiputados que inspeccionan el urbanismo valenciano los males de esta visita. González Pons aludió al "bajo nivel" de los representantes del Comité de Peticiones y a la "vaguedad" de sus propuestas. Al encuentro con el consejero acudieron los promotores Francisco Murcia y Salvador Vila, y los empresarios turísticos Vicente Blasco y y José Manuel Baixauli.

Procedimientos poco transparentes y expropiaciones a bajo precio

Dentro de la reunión, a puerta cerrada, Libicki explicó que su visita obedecía a que ciudadanos europeos, entre ellos españoles, habían enviado al PE denuncias relacionadas con el urbanismo y la construcción y que su obligación era investigarlas porque así lo reconoce la Carta de la Unión Europea. Según explicó el eurodiputado polaco, en las quejas se denuncian unos procedimientos poco transparentes y que las expropiaciones se pagan a bajo precio. Los peticionarios también se quejan de que el urbanismo valenciano es duro y agresivo y atenta contra el desarrollo sostenible. Michael Cashman recordó que todavía quedan proyectos que se tramitan al amparo de la derogada LRAU, por lo que el problema sigue ahí. Según añadió el laborista inglés, la Ley Urbanística Valenciana no acaba con la falta de transparencia en la adjudicación de los PAI. Además especificaron que la Sindicatura de Greuges coincidió con ellos en bastantes puntos.

La visión de los empresarios, que hicieron declaraciones a la salida, sobre el encuentro fue otra. José Manuel Baixauli, de Viajes Geisha, se quejó de que la visita de los eurodiputados estaba provocando cuantiosas pérdidas, que llegó a valorar en 2.000 millones de euros, citando además datos del Banco de España. "Van coincidiendo los descensos de la inversión con las visitas de los eurodiputados", subrayó. El promotor Salvador Vila lamentó que la delegación no les entregara las 15.000 denuncias. Vicente Blasco reconoció que al turismo receptivo nos crea un perjuicio. "Puede haber abusos, probablemente, pero para eso están los tribunales".

En el encuentro, un empresario llegó a aludir a los posibles intereses personales que podían tener ambos diputados en relación con la visita. A lo que Libicki respondió que no era el momento ni el lugar. El propio Cashman invitó a quienes le acusan a que pongan por escrito sus acusaciones y las denuncien.