Isozaki se alinea con el Ayuntamiento en la polémica sobre la pasarela de Calatrava
Inaugurada la conexión de Uribitarte con la Ría denunciada por el arquitecto valenciano
Cuatro años después del inicio de las obras del complejo, el Ayuntamiento de Bilbao abrió ayer el acceso directo entre el complejo de Uribitarte y el Campo de Volantín, cuya conexión con la pasarela de Santiago Calatrava ha sido denunciada ante los tribunales por el arquitecto valenciano. El japonés Arata Isozaki, quien ha diseñado el nuevo acceso y los dos rascacielos de la zona, aseguró en la inauguración que no entendía la postura de su colega y mostró su apoyo al consistorio. Isozaki, se mostró concernido en esta polémica, porque va contra un proyecto "que es el mío".
Los bilbaínos ya pudieron transitar, poco antes de las 13 horas, por el nuevo acceso directo de 60 metros de longitud entre la pasarela peatonal de Calatrava -que cruza la Ría desde el Campo Volantín- y la gran escalinata que desciende de Alameda de Mazarredo por el centro del complejo urbanístico de Uribitarte: dos torres de 82 metros de altura y siete edificios y pasajes comerciales, todos en construcción.
El enlace directo con la pasarela de Calatrava se ha resuelto con un paso elevado que empalma con el tablero del puente, lo que ha llevado al arquitecto valenciano a presentar una demanda por vulneración de la propiedad intelectual y daños morales a su obra. En ella, exige suprimir la conexión o el pago de una indemnización.
Esta polémica estuvo presente en el acto inaugural. El alcalde Iñaki Azkuna hizo referencia a su discurso a los múltiples problemas en el proyecto de Uribitarte (los vecinos lo llevaron a los tribunales después de que en los 90 fracasara otro proyecto inmobiliario que dejó una agujero de 102,1 millones de euros) y afirmó en que los litigios judiciales no han acabado. Sin referirse de manera directa a la demanda de Calatrava, mostró su esperanza en que "ganemos el pleito".
El alcalde no desaprovechó la ocasión para aludir a los problemas del puente, que ha causado multitud de resbalones y ha obligado ya a sustituir sus 560 losetas de cristal. "Que lo utilicéis con salud", dijo en referencia a la conexión proyectada por Isozaki, "y no os caigáis en el puente". El PSE ha pedido su comparecencia para que explique si va a reclamar a Calatrava los daños y los cambios de losetas y el PP solicita que se investigue porqué se devolvió en 1999 el aval, si se conocían esos problemas.
Isozaki señaló que la demanda, dirigida contra el consistorio y las dos empresas constructoras, también le concierne a él. Tras mostrar su apoyo a la postura del Ayuntamiento, señaló que la demanda "también es en contra de un proyecto que es el mío". Recordó que el valenciano ya tuvo problemas con el inglés Norman Foster y afirmó no entender cómo un arquitecto "dé éxito" se presta a estas polémicas. "He creado muchas obras en otras partes del mundo y sólo aquí me encuentro con esta lucha de arquitectos".
Zona de paseo y estancia
Isozaki mostró su incomprensión por "polemizar por algo que es un servicio para los ciudadanos". Y aseguró estar dispuesto a hablar de este asunto con Calatrava, que no se ha dirigido hasta ahora a él, y añadió que estos temas se resuelven "con el diálogo". "No me gusta salir en los medios por polémicas, ni tampoco los tribunales".
Isozaki explicó que la plaza abierta ayer pretende ser un zona de paseo y de estancia para los peatones. "Quiero que la gente se siente en las escalinatas". Agregó que su "mayor intención" con el complejo urbanístico es "la conexión entre el centro de la ciudad y la orilla del río, y de las dos márgenes entre sí".
La plaza central tiene una escultura de Eduardo Chillida, Buscando la luz IV, de 8,5 metros de altura y 23 toneladas de peso, realizada en acero. La obra también se inauguró ayer, con la presencia de la viuda del escultor, Pilar Belzunce. Azkuna anunció su deseo de que esta zona se llame Plaza de la Convivencia.
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