Missoni y Versace cierran la Semana de la Moda de Milán
La Pasarela de Milán tuvo este fin de semana un broche de cierre de gran altura e impacto con los desfiles de Missoni y de Versace. Al frente de ambas casas, dos mujeres de segunda generación: Angela Missoni, hija de Rosita y Octavio Missoni, fundadores del sello del zig-zag multicolor, y Donatella Versace, hermana menor del desaparecido Gianni. Missoni se aventura en cambios, no abusa del cromatismo y se vuelca en la piel y el brillo del lurex tramado, un ingenio tecnológico que da lustre a los tejidos. Versace apuesta por una nueva silueta triangular en abrigos cortos y vestidos de fiesta espectaculares, con toque clásico en los plisados de la organza más delicada. Donatella usa las pieles sintéticas junto a la cinchilla, en un mensaje positivo de conciencia ecológica. Missoni por su parte agrega una refinada corsetería de piel en tiras finas que crean trama y resaltan la silueta. Al terminar la Semana de la Moda de Milán coleaba todavía la polémica entre Giorgio Armani y la enviada especial de The New York Times, Cathy Horin, con un despiadado cruce de declaraciones enconadas bajo los que planea un tema crucial: el derecho del periodista a opinar y el del diseñador a cerrarle las puertas de su casa. Ríos de tinta que volverán en otoño, ahora una pausa para disfrutar la buena moda.
![Una maniquí desfila con un modelo de Versace.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/IZRCDIHOZTIUARK4AACLPVI2I4.jpg?auth=642d0360fcaa3a09859e06a84d9cc5a410759448e2bdcc361fdb36a6f264b933&width=414)