¿Sociedad del conocimiento?
El ex presidente del Gobierno de España, señor Aznar (Ansar, para los amigos), no sabía que no había armas de destrucción masiva en Irak. El candidato digital a presidente del Gobierno español por el Partido Popular, señor Rajoy, no sabía que, durante el mandato del señor Aznar, se habían enviado policías españoles a interrogar presos en el limbo jurídico de Guantánamo. El ex presidente de la multinacional Telefónica, SA, no sabe, a estas alturas, cómo se llevó a cabo el vaciamiento patrimonial y posterior quiebra de la empresa Sintel, que dejó en la calle a más de mil ochocientos trabajadores, a quienes, por añadidura, se les adeudaba la nómina de siete meses trabajados. Durante más de treinta años, nuestros dirigentes tampoco han sabido qué era de la población saharaui ni del territorio del Sáhara Occidental, antigua colonia española desde 1885 e incluso provincia española bajo la dictadura de un famoso general.
Si no fuera porque verdaderamente no es así y porque detrás de la pretendida ignorancia que tantos próceres alegan hay muchos miles de muertos e inenarrables tragedias humanas, tendríamos muchas razones para pensar que, en lugar de vivir en la flamante sociedad del conocimiento, estamos, más bien, en la sociedad del desconocimiento. Un desconocimiento sospechoso y culpable, por cierto. ¡Vaya ejemplo para la educación de nuestros jóvenes.
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