Las heridas de la Tierra
Expertos debaten en Cádiz sobre los efectos del cambio climático
El niño del Serengueti fantaseaba mientras llevaba agua a casa. Y a cada paso de ese trayecto distraído perdía parte del contenido. Javier Ruibal estrenó ayer esta canción sobre la infancia en el debate organizado por EL PAÍS en la Diputación de Cádiz alrededor del cambio climático. El cantante portuense ilustró con su música lo que los expertos habían explicado anteriormente con palabras. La falta de conciencia sobre los efectos del deterioro medioambiental del planeta agrava diariamente el problema. "La Tierra está herida", citó el investigador Juan Negrillo, "y se está defendiendo".
Negrillo es el primer español colaborador del proyecto Climate Project que auspicia el estadounidense Al Gore. Ayer detalló los problemas que el mundo sufre por el aumento de las temperaturas. Los principales, el deshielo y la desertización, que son causa de otros como el incremento de las inundaciones, el desplazamiento de las estaciones o los cambios de comportamientos de los animales. El investigador cree que en torno a este debate se ciernen tres graves errores: la difusión de que no hay acuerdo científico sobre la gravedad de este fenómeno y que por lo tanto no es tan preocupante; la creencia de que hay que elegir entre economía y medio ambiente; y, sobre todo, la opinión de que es un problema irreversible. Negrillo abogó por las soluciones individuales para afrontar una dificultad global. "Afortunadamente, la voluntad es un recurso renovable", aseguró.
En el Salón Regio de la Diputación, con todas las butacas ocupadas, el meteorólogo Florenci Rey confirmó después el aumento de las temperaturas, la desaparición de las estaciones en 25 años y el incremento de las precipitaciones torrenciales. Son, según explicó, las respuestas del planeta al calentamiento global.
El científico Miguel Delibes de Castro aportó que gran parte de los inconvenientes para hallar soluciones al problema es la falta de una conciencia sobre su existencia. "Hasta que no lo vemos, no lo creemos", sostuvo. Sin embargo, no coincidió con Negrillo a la hora de apuntar como una causa la revolución científica. "Es como culpar a nuestra inteligencia. Si nos hubiésemos quedado como monos seguramente no hubiese ocurrido nada de esto", añadió, "pero tampoco podríamos ahora alcanzar nuestro grado de desarrollo y las posibilidades de investigación". Preguntado por uno de los asistentes sobre los efectos que el cambio climático tendrá en Andalucía, Delibes de Castro vaticinó un aumento de la inmigración y una drástica pérdida de riqueza botánica en espacios emblemáticos como Sierra Nevada o Doñana. "Desde aquí se pueden hacer cosas. A lo mejor habría que empezar a plantearse hacer campos de golf con albero", propuso Delibes de Castro.
El debate, moderado por el rector de la Universidad de Cádiz, Diego Sales, fue clausurado con las canciones de Javier Ruibal. Letras sobre la pobreza, "otro gas en la atmósfera de la Tierra", y su estreno sobre el niño del Serengueti. El que va arrojando agua sin la conciencia de estar perdiendo un auténtico tesoro.
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