Trias reúne a 1.200 personas en una cena de apoyo a su candidatura

Faltan 100 días para las elecciones municipales del 27 de mayo y Convergència i Unió (CiU) lo celebró anoche reuniendo a más de 1.200 personas en una cena de apoyo a Xavier Trias, candidato a la alcaldía de Barcelona. Junto a él, la plana mayor de la federación -Artur Mas, Josep Antoni Duran Lleida y Jordi Pujol-, que avaló el "cambio" que pregona Trias para acabar con 28 años de "hegemonía, monopolio, prepotencia y desprecio" socialista en la ciudad e imprimir una nueva forma de gobernar Barcelona más "participativa" y "próxima al ciudadano".

"Ayúdanos a hacer el cambio que Barcelona necesita. Juntos podemos" es el lema que Trias ha escogido para esta precampaña electoral y que ayer, en un abarrotado Palacio de Congresos de Barcelona, convirtió también en eje de su intervención.

Después del cambio de alcalde en el Consistorio -Joan Clos por Jordi Hereu-, sumado al declive electoral que sufrió el Partit dels Socialistes (PSC) en las elecciones autonómicas de noviembre -perdió el 23% de los votos-, los nacionalistas y sobre todo Trias están convencidos de que CiU, por fin, puede conquistar este invicto feudo electoral socialista. Y, de paso, romper con la preeminencia de izquierdas en ambos lados de la plaza de Sant Jaume. Pero nada dijo de sus posibles socios de gobierno y de las eventuales alianzas para conquistar la alcaldía.

Un nuevo proyecto

Trias cree haber encontrado la fórmula: un nuevo estilo de gobernar Barcelona que acabe, señaló, con la "desconfianza" entre electores y políticos a partir de un "nuevo Ayuntamiento, con nuevas caras, nuevos liderazgos y un nuevo proyecto". "Hace falta pasar de un proyecto que hasta ahora se ha fundamentado en la organización de un acontecimiento, en el urbanismo duro y la promoción de la marca, a otro con un nuevo triángulo en el que el vértice sean la responsabilidad y la sensibilidad, el trabajo y la vivienda, y los servicios y la seguridad. Hace falta pasar de la autocomplacencia a la ambición, del espectáculo a los servicios, del escaparate a las personas", proclamó.

El alcaldable nacionalista no ahorró críticas contra Jordi Hereu, a quien describió como un candidato "impuesto" desde la sede del PSC con el único objetivo de renovar el tripartito "para poder garantizarse el sillón". "Tenemos un alcalde sin liderazgo, siempre preocupado de hacerse la foto y hacer de Barcelona una ciudad escaparate y de grandes acontecimientos, que no de solucionar los problemas y retos de futuro que planta la ciudad", criticó Xavier Trias.

Para el candidato nacionalista, uno de los principales errores del actual equipo de gobierno de socialistas, Esquerra e Iniciativa, ha sido su estilo de gobernar de "espaldas" al ciudadano, sin "escuchar" el pulso de los barceloneses y con "escasa" participación del tejido asociativo.