Un Estatuto muy sindical

Los sindicatos se han volcado de manera decisiva a la campaña del referéndum del 18-F a favor del sí. Su campaña ha sido quizá más limpia y directa que la de los propios partidos políticos, inmersos en el horizonte del próximo escenario electoral. Tanto Comisiones Obreras como UGT han trasladado a su afiliados la necesidad de la participación masiva en la consulta, así como la necesidad de un respaldo suficiente para un Estatuto, del que se hacen partícipes y que califican como de progreso, para la igualdad y de defensa de los trabajadores, manteniendo la cohesión.Los sindicatos se han volcado de manera decisiva a la campaña del referéndum del 18-F a favor del sí. Su campaña ha sido quizá más limpia y directa que la de los propios partidos políticos, inmersos en el horizonte del próximo escenario electoral. Tanto Comisiones Obreras como UGT han trasladado a su afiliados la necesidad de la participación masiva en la consulta, así como la necesidad de un respaldo suficiente para un Estatuto, del que se hacen partícipes y que califican como de progreso, para la igualdad y de defensa de los trabajadores, manteniendo la cohesión.Los sindicatos se han volcado de manera decisiva a la campaña del referéndum del 18-F a favor del sí. Su campaña ha sido quizá más limpia y directa que la de los propios partidos políticos, inmersos en el horizonte del próximo escenario electoral. Tanto Comisiones Obreras como UGT han trasladado a su afiliados la necesidad de la participación masiva en la consulta, así como la necesidad de un respaldo suficiente para un Estatuto, del que se hacen partícipes y que califican como de progreso, para la igualdad y de defensa de los trabajadores, manteniendo la cohesión.

"Buena caja de herramientas"

CC OO elogia el texto y luchará para que se cumpla

"El sindicato tiene cierta timidez a la hora de hablar de estas cosas. Y de rentabilizar lo que aportamos a que se den estos avances. Tenemos que explicar bien a los trabajadores que lo que se vota el día 18 es algo que nos interesa económicamente a los trabajadores". Tras hacer un breve repaso a la lucha sindical desarrollada por el sindicato en el periodo preautonómico, el líder de las Comisiones Obreras de Andalucía, Francisco Carbonero, se dirigió a más de un centenar de delegados de la provincia de Jaén, y les advirtió: "Hay que hacerlo con convencimiento, eh, como sabemos hacerlo".

Comisiones ha desarrollado también una campaña en pos del sí al Estatuto de Autonomía de Andalucía. Un acto por provincia para aleccionar a los delegados y de ahí a las empresas y centros de trabajo. 65.000 folletos y dípticos han apoyado sus actos, además de un vídeo que, con imágenes y fotos del archivo histórico del sindicato y la voz de la Blanca y verde de Carlos Cano, trata de representar los avances de una Andalucía emigrante que viajaba en un viejo tren a la vendimia francesa y que ahora viaja en AVE y crece más que sus vecinos de Europa.

Carbonero explicaba a sus dirigentes locales que el sindicato, con el vigente Estatuto, "ha firmado acuerdos contractuales impensables hace 25 años". "Por ello", decía, "hay que votar sí al Estatuto para incrementar la acción sociopolítica del sindicato. No sólo defender a los trabajadores en los intereses profesionales y en las empresas sino también en la familia, en su entorno y ante la economía".

Tras repasar los principales logros sindicales introducidos en la reforma, Carbonero hizo hincapié en un dato poblacional que caló hondo en su audiencia: "El Estatuto es capaz de arraigar a la población rural, como lo ha hecho el vigente. Y eso no ha sucedido en otros pueblos de España. Hoy podemos decir que en muchas zonas de Andalucía el medio rural está creciendo".

Finalmente, Carbonero hizo alusión al reconocimiento "que por primera vez se le da al papel que jugamos los sindicatos", para valorar a continuación que la norma andaluza sitúe el diálogo social "como elemento fundamental para el desarrollo económico de nuestra tierra".

"El Estatuto será una buena caja de herramientas para que el sindicato la tome en sus manos y exija y plantee a los diferentes gobiernos que cumplan lo que aprobemos el día 18".

"Es un compromiso con uno mismo, se trata de nuestros intereses particulares y colectivos, pero para CC OO es un compromiso con el futuro, con el progreso, con Andalucía, y con las futuras generaciones. Tenemos que poner la maquinaria como sabemos hacer Comisiones Obreras en primer lugar para que se participe y que esa participación vaya con el sí".

""No es sólo de los políticos"

UGT pide el sí masivo y reivindica su trabajo en la reforma

Para la UGT, la campaña del Estatuto "no es un acto común del sindicato", en palabras de Manuel Pastrana, su secretario general. "En este caso la importancia va más allá del sindicato, no es una ley menor, es tomar una decisión vital sobre el marco legal que va a condicionar nuestras vidas. Peleemos para que salga con el máximo apoyo". Así se dirigía Pastrana en Córdoba a un centenar de delegados de la provincia, en una de las asambleas organizadas por UGT para movilizar a sus cuadros en busca del voto afirmativo el 18-F.

"Lo que beneficia a los trabajadores es que tengan suficiente conocimiento del Estatuto y votar el 18-F con suficiente conocimiento y votarlo afirmativamente", seguía Pastrana ante un auditorio convencido.

UGT ha realizado ocho asambleas provinciales además de otros ocho actos dirigidos a las mujeres para movilizar a sus afiliados y simpatizantes. Además de otros actos conjuntos con Comisiones Obreras y con distintas organizaciones sociales, desde el sindicato se han editado 10.000 folletos con la propuesta de reforma elaborada por UGT y el texto final aprobado, 50.000 dípticos en favor del sí, además de una presentación audiovisual y una informática.

Pero para levantar el ánimo de su auditorio, Pastrana tiro de manual y arengó a sus delegados en tono más mitinero: "Hay una cierta sensación de que esto del Estatuto es un juego más de los políticos, un arma arrojadiza más, un movimiento de confrontación política, y eso desfigura bastante su importancia".

Y a continuación inculcó a los suyos que el nuevo Estatuto es algo propio: "Es una oportunidad para los trabajadores. Somos la mayor organización social de Andalucía, y nuestra posición ha sido la de aprovechar la oportunidad para que la realidad sociolaboral de los trabajadores estuviera recogida en términos de objetivos, de aspiraciones, de derechos, de mecanismos... Nos agarramos a la posibilidad de intervenir por primera vez en la historia en la configuración de nuestro máximo marco normativo. Cuando se hizo el anterior Estatuto la UGT no rascó bola. Y creo que la inmensa mayoría de las cuestiones que hemos planteado están contenidas en el nuevo texto. No puede ser un Estatuto de los políticos. Hemos dibujado un modelo de sociedad basado en la justicia social, la igualdad y la solidaridad y los derechos en el mundo del trabajo. Se contempla el derecho al empleo, pero empleo de calidad".

Pastrana insistió a sus cuadros que se puede comparar el nuevo Estatuto con las Constituciones más avanzadas en materia de derecho laboral y social que existen en el contexto europeo. Y concluyó: "Id pueblo a pueblo, centro a centro, empresa a empresa, y explicarlo, que un buen trabajo se convierta en una buena norma y que tenga el respaldo suficiente".