Jordi Hereu, anfitrión en el desvencijado El Molino
En un estado que permitía apenas intuir el brillo de sus mejores tiempos, El Molino acogió ayer una visita de representantes de la plataforma que durante los últimos años ha luchado para conseguir su recuperación. El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, ofició de anfitrión, acompañado de la concejal del distrito de Sants-Montjuïc, Imma Moraleda, así como de responsables de la empresa propietaria y del equipo de arquitectos que proyecta la reforma del local, que se iniciará en los próximos meses. Los miembros de la plataforma agradecieron el rescate de la sala, pero lamentaron que éste proceda de la iniciativa privada y no se haya ejecutado un plan de expropiación como el anunciado para el Teatro Arnau. A mediados de marzo se organizará un fin de semana de puertas abiertas para que los ciudadanos puedan visitar El Molino antes de su cierre por obras.
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