Internet en los jardines del Turia por 180.000 euros

La implantación de un sistema de tecnología Wi-Fi en los jardines del antiguo cauce del río Turia, en Valencia, apenas tendría un coste de 180.000 euros. Un estudio de los servicios de innovación e informática del ayuntamiento presupuestó en 2005 ese precio para torretas, antenas, alimentadores y una acometida eléctrica desde el Palau de la Música hasta la Ciudad de las Artes y las Ciencias. "Sería muy sencillo y barato. Bastaría con cobrar una pequeña cuota a los abonados de cerca de 10 euros", afirma Juan Ferrer, concejal socialista en Valencia.

Sin embargo, el gobierno municipal sólo ha puesto en marcha un proyecto para equipar de tecnología Wi-Fi a las bibliotecas municipales. Desde el pasado 16 de noviembre, las 30 disponibles en la ciudad, disponen de este equipamiento. No es un gran número si tenemos en cuenta que hay 300.000 usuarios de wireless en Valencia. En la web municipal

(www.valencia.es), se enumeran las propuestas para acceder a Wi-Fi municipal. Anuncian 120 puntos de acceso instalados en diferentes centros de titularidad municipal como alcaldías de barrio, juntas de distrito, centros de Servicios Sociales y Juventud, complejos deportivos e instalaciones de atención a personas mayores. En ninguno de esos puntos está activo.

Los foros de las comunidades virtuales están inundados de propuestas de lugares para convertirlas zonas de acceso libre a Internet. La que más suena es la dársena del puerto donde se celebrará la Copa del América este verano. Desde la Delegación de Innovación del ayuntamiento niegan estar elaborando un plan. Posiblemente haya miedo a la escasa seguridad que protege las zonas wireless al aire libre.

Referencia insegura

El contexto legal que tiene en cuenta el ayuntamiento para proyectar estas zonas alude a un experimento que hizo el Ayuntamiento de Madrid. A lo largo del Paseo de la Castellana, un autobús municipal rastreó las señales de banda ancha con una antena wlan. La experiencia tenía como objetivo comprobar la confidencialidad de las redes privadas. A lo largo de la avenida pudieron conectarse a 80 redes diferentes. De ellas, el 61%, no tenía niveles de seguridad mínimos.

Un rastreo de un equipo del departamento de innovación de Valencia encontró, en los alrededores de la calle de Colón, 200 redes, el 72% de ellas sin protección. El informe concluyó que las redes al aire libre no garantizan la confidencialidad. Para Ferrer también hay que contar con la oposición de las teleoperadoras. "Un precio de 10 euros, es casi un 25% de lo que ellos normalmente cobran por dar banda ancha en las casas".