Bruselas amenaza con sanciones por los daños ambientales de la M-501

La Comisión Europea (CE) ha dado un tirón de orejas al Gobierno regional de Esperanza Aguirre por las obras que está realizando en la M-501. Según Bruselas, la Comunidad ha fragmentado la información del proyecto para así "minimizar" los daños ambientales que provocará la reforma en una zona de "gran valor medioambiental". Por todo ello, la CE pide al Ejecutivo que evalúe de manera real los impactos de la obra o abrirá un expediente sancionador.

Peter Carl, director general de Medio Ambiente de la Comisión Europea, ha enviado una carta al Gobierno regional, a través del Ministerio de Medio Ambiente, en la que se exige que informe de manera global sobre la M-501 y no haga "informes parciales". De lo contrario, abrirá un expediente sancionador.

El objeto de esta petición es analizar el proyecto y saber si éste se adapta a la Directiva Hábitat, a la vez que conoce el efecto que podría tener sobre la Zona Especial de Protección para Aves (ZEPA) de los encinares de los ríos Cofio y Alberche. La CE escribió una carta de emplazamiento a la Comunidad en octubre de 2006 reclamando esta información, y al no estar satisfecha con la respuesta ha pedido más en otra fechada el pasado día 18.

La Comisión advierte de que las obras que se están acometiendo en la llamada carretera de los pantanos "deberán cumplir lo marcado en los apartados 3 y 4 del artículo 6º de la Directiva Hábitats (92/43/CEE)", que establecen que cualquier proyecto debe someterse a "una adecuada evaluación de sus repercusiones en el lugar, teniendo en cuenta los objetivos de conservación".

El Gobierno de Esperanza Aguirre declaró este proyecto de interés general para no tener que realizar una declaración de impacto ambiental. En la carta de emplazamiento, Bruselas pide al Gobierno regional que realice una "correcta evaluación de las repercusiones del proyecto sobre la ZEPA, teniendo en cuenta los objetivos de conservación del lugar". "Las autoridades españolas deben asegurar que las medidas se refieran a aspectos estructurales y funcionales de la integridad del lugar y a las poblaciones de especies afectadas", añade.

La CE abrió en otoño un expediente a España por considerar que los trabajos de ampliación de la M-501, que supondrán la conversión en autovía de un tramo comprendido entre Quijorna y Navas del Rey, ponían "en grave peligro áreas protegidas".

Por otro lado, la Asociación Sierra Oeste Desarrollo SOStenible y Ecologistas en Acción han denunciado ante el fiscal coordinador de Medio Ambiente y Urbanismo, Antonio Vercher, las irregularidades que en su opinión se están cometiendo en la M-501. Vercher confirmó ayer que ha recibido la documentación y ha solicitado a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que investigue lo sucedido. Según las organizaciones ecologistas, se han presentado decenas de denuncias ante el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) sobre los incumplimientos de las condiciones ambientales que la propia Comunidad se había "autoimpuesto" al carecer de evaluación de impacto.

"El arbolado afectado por las obras no se ha trasplantado, en su mayor parte, sino que se ha talado", dicen las organizaciones ecologistas. "De los 3.300 ejemplares que en principio se iban a trasplantar, sólo se han trasplantado entre 500 y 700 (algunos en el campo de golf de Pitis). El trasplante, en lugar de hacerse en invierno, se hizo durante el verano, con temperaturas que superaban los 35 grados".

La Consejería de Transportes justificó el cambio de fechas por un informe de los profesores de la Escuela de Montes, que aconsejaban trasplantar durante el verano debido al parón biológico. Transportes se ha comprometido a replantar más de 3.300 árboles.

En estos días, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha desestimado el tercer recurso interpuesto por Ecologistas en Acción para parar la obra.