Más de la mitad de la población carece de autobús urbano

La adicción de los gallegos al volante responde sobre todo a la falta de alternativas. Según el estudio sobre la movilidad, el 61% de la población de la comunidad no disfruta de ningún servicio de autobús urbano, una carencia que sufren sólo el 31% de los españoles. Esta "infradotación" explica, junto con "posibles razones de ineficiencia", la baja utilización del transporte público en Galicia.

Sólo un 7% de las 790.000 personas que se desplazan cada día en la comunidad para acudir al trabajo se sube a un autobús. El 22% opta por ir a pie o en bicicleta y la gran mayoría, un 68%, lo hace en automóvil o motocicleta, los dos medios de transporte menos ecológicos. Según el informe de los tres profesores de la Universidad de A Coruña, son 543.000 gallegos los que a diario se montan en su coche para viajar a su puesto de trabajo. Frente a ellos, no llegan a 700 los que prefieren moverse en tren.

En las áreas urbanas donde sí se ofrece el servicio de bus este medio de transporte tampoco triunfa. La ciudad en la que los trabajadores usan más el coche para cumplir con sus obligaciones laborales es Ferrol. En este municipio el 63% de sus vecinos acuden a trabajar en automóvil y el 27% lo hacen andando.

En Vigo y Santiago el porcentaje de automovilistas es del 62% y el de quienes realizan el trayecto a pie es del 20% y el 24% respectivamente. En Lugo y Pontevedra van en vehículo privado el 59%, en A Coruña, el 53% y en Ourense, el 52%. El estudio lamenta que "bastante más de la mitad de los habitantes de estas poblaciones se decanten por el medio de locomoción más insostenible".

Poco uso en las ciudades

A Coruña es la ciudad gallega en la que más se utiliza el autobús urbano para ir a trabajar. El 17% de los coruñeses opta por el transporte público y el 27% se desplazan a pie. El uso del bus alcanza en Vigo el 13% y en Santiago, el 11%, pero cae al 8% en Ourense, al 6% en Ferrol, al 4,6% en Lugo y al 3,6% en Pontevedra.

"Su escasísimo uso denota, por una parte, aspectos de ineficacia o de carencia de una optimización adecuada y, por otra, de acciones de sensibilización y promoción de este tipo de sistema de movilidad, paralelas a la disuasión en el uso de medios de transporte más insostenibles, como el automóvil privado", concluye el informe elaborado por los profesores González Laxe, Martín Palmero y Miguélez Pose. Según datos de la Comisión Europea que han sido incluidos en el estudio, el 40% de las emisiones de CO2 que se producen en Europa se registran precisamente en áreas urbanas.