La nueva ley de incendios obligará a separar las casas de pinos y eucaliptos

Los propietarios de plantaciones de eucaliptos y pinos que están a menos de 50 metros de una vivienda tendrán dos años para aumentar esta distancia y así cumplir la nueva Lei de Prevención e Defensa contra os Incendios que aprobó ayer el Consello de la Xunta. La norma prohíbe plantar estas especies cerca de las casas, obliga a mantener limpios de maleza los perímetros de los núcleos habitados junto a un monte y crea una red de cortafuegos en todo el territorio gallego para evitar que el fuego se extienda con facilidad. Además se refuerza la vigilancia para detectar incendios, se limitan las quemas controladas y los espectáculos de pirotecnia. Para el presidente gallego, Emilio Pérez Touriño, el proyecto de ley se propone acabar con un "problema histórico" del país.

La Xunta trazará en el territorio gallego una red de franjas de protección para evitar que las llamas se propaguen. Estos cortafuegos se ubicarán en los montes y alrededor de lugares habitados, carreteras, vías ferroviarias, líneas de distribución de energía, áreas recreativas y polígonos industriales. Los vecinos están obligados a retirar la biomasa vegetal de todas las parcelas que estén a menos de 50 metros de un monte y las que se encuentren en una franja de 100 metros alrededor de núcleos de población, depósitos de basura, instalaciones industriales y obras.

Las viviendas, comercios, industrias o instalaciones agrícolas que se construyan en zonas forestales o de alto riesgo de incendios deberán contar con tomas de agua y características especiales de resistencia.