La campaña de la Junta para el 18-F empieza con bronca por el lema

La campaña institucional de la Junta para el referéndum de ratificación del Estatuto andaluz, el próximo 18 de febrero, invita de manera sutil a la participación, en contra de la resolución del Tribunal Supremo dictada el 6 de junio pasado con motivo de la campaña estatutaria catalana. Así lo cree el PA, que la denunció, mientras el PP estudia seguir este camino ante la Junta Electoral Central (JEC). No obstante, el Gobierno andaluz está convencido, porque así se lo han dicho sus servicios jurídicos tras analizar los anuncios al derecho y al revés, que está "plenamente ajustada a lo que la ley establece".

La campaña, de 1,5 millones de euros, diseñada por la empresa catalana Bassat Consultores -que también hizo la del Estatuto catalán- es atractiva. A través de personajes andaluces muy conocidos y populares, se leen algunos preceptos del Estatuto, todos ellos muy positivos, que concluyen con el mensaje de que se trata de un "empeño" o un "compromiso muy nuestro", lema central de la campaña.

Casi a la misma hora que los consejeros de la Presidencia, Gaspar Zarrías, y de Gobernación, Evangelina Naranjo, presentaban en conferencia de prensa el contenido de los mensajes, el PA, ue no acudió a la presentación social de la campaña, la denunciaba ante la JEC.

Los servicios jurídicos de la Junta de Andalucía han echado todos los vistazos necesarios, y aún más, para analizar si los mensajes institucionales vulneraban las resoluciones de la Junta Electoral Central y del Tribunal Supremo. Ambas instancias, en aplicación de la Ley Orgánica del Régimen Electoral y en respuesta al recurso interpuesto por dos partidos en Cataluña, concluyeron que la Generalitat debía limitarse a "facilitar información a los ciudadanos sobre la fecha de votación, el procedimiento para votar y los requisitos y trámites del voto por correo".

En otra instrucción del 31 de enero de 2005, con motivo del referéndum de la Constitución europea, la JEC autoriza a los poderes públicos a "realizar una campaña de información" sobre el tratado europeo "siempre que ésta se limite a informar, con objetividad y pleno respeto al principio de neutralidad política, sobre el contenido" del tratado.

Esto es, a juicio de Zarrías, a lo que se ha limitado la Junta: "La campaña es divulgativa, ajustada plenamente a la ley", repitió en varias ocasiones.

Los spots televisivos, dirigidos a un público joven y adulto, intervienen los gaditanos Andy y Lucas, con un mensaje sobre el empleo estable y de calidad; la periodista malagueña María Teresa Campos, sobre las iniciativas emprendedoras; el actor cordobés Fernando Tejero, habla de la igualdad de oportunidades para hombres y mujeres; el periodista onubense Jesús Hermida (que da una impronta personal a su texto) habla del bienestar, la igualdad y la justicia social como "un compromiso muy nuestro"; la actriz sevillana Paz Vega, publicita el potenciar los recursos de Andalucía; y la cantaora granadina Estrella Morente, el patrimonio artístico y natural.

En su denuncia, los andalucistas aseguran que la campaña entra en una "absoluta subjetividad" y llama al "compromiso" de los andaluces con la propuesta que se someterá a consulta. A juicio del PA, el Gobierno traslada "una carga moral a los ciudadanos de que lo tiene que apoyar e ir a votar porque es algo muy nuestro", lo que, añade, "rompe por completo el carácter neutral de las campañas institucionales".

El PP no se pronunció ayer abiertamente sobre la posibilidad de denunciar la campaña, aunque lo está "estudiando".

El Gobierno andaluz no está para nada preocupado con el recurso ante la JEC no sólo porque cree que no prosperará, sino porque opina que la bronca ayudará a dar a conocer el referéndum del 18-F. El secretario de Organización, Luis Pizarro se confesó "entusiasmado" con la campaña; mientras que el coordinador de IU la consideró "exquisita", aunque él hubiera sido "más atrevido".