Tres accidentes consecutivos con 12 vehículos colapsan durante cuatro horas la A-8 en Bilbao

Tres accidentes consecutivos, en los que se vieron implicados 12 vehículos, causaron ayer un monumental atasco en la A-8 a su paso por Barakaldo: la autopista tuvo que ser cerrada en un sentido durante una hora y los accesos a Bilbao estuvieron colapsados casi cuatro. Al suceder en hora punta, las consecuencias fueron aún peores y el desvío del tráfico de Cantabria y la Margen Izquierda por otras carreteras tampoco evitó las retenciones. El atasco llegó a extenderse a lo largo de ocho kilómetros, entre los municipios de Barakaldo y Ortuella. La situación no se normalizó hasta cerca del mediodía.

La cadena de colisiones se produjo a las 7.00, por lo que las consecuencias se trasladaron de forma inmediata al tráfico de entrada a Bilbao por la A-8, que sin accidentes ya es de por sí problemático. La autopista, a la altura de Barakaldo y en dirección a San Sebastián, estuvo cerrada casi una hora, hasta que cerca de las 8.00 se logró abrir uno de los tres carriles. Luego se pudo poner en servicio otro y la apertura del tercero se demoró hasta pasadas las 10.00, con lo que las retenciones continuaron. El tráfico no quedó normalizado hasta cerca de las once de la mañana.

Las colisiones se produjeron en uno de los puntos negros de la autopista a su paso por el área metropolitana bilbaína, las curvas de Zorroza, en Barakaldo. De los 12 vehículos implicados, dos eran camiones y uno de sus conductores -J.A.D.M., vecino de Erandio de 33 años- tuvo que ser rescatado por los bomberos al quedar atrapado en el vehículo. Fue el herido más grave y quedó ingresado en el Hospital de Basurto, mientras que otros dos contusionados leves fueron evacuados al centro sanitario de Cruces.

La consecuencia más importante fue el colapso de los accesos a Bilbao, puesto que las retenciones llegaron hasta Ortuella, lo que supone cerca de ocho kilómetros. Pese a que la Ertzaintza desvió el tráfico por otras carreteras, como el corredor del Txorierri, los conductores tuvieron que soportar una circulación muy lenta y próxima al colapso.

Por la tarde, se registró otra colisión por alcance entre cinco vehículos en el Corredor del Txorierri, a la altura de Sondika, que causó retenciones de importancia durante casi una hora.

También en la A-8, en San Sebastián, en dirección a Polloe, se produjeron colas de vehículos de hasta 2,5 kilómetros después de que, a las 18.15, chocaran entre sí dos automóviles. Quince minutos después, en la misma autopista, a la altura de la salida de Balmaseda, otro siniestro originó retenciones que se mantenían todavía una hora después.

[El PP ha pedido a la Diputación de Guipúzcoa que rebaje en un 75% el peaje de la A-8 entre Zarautz y San Sebastián a los usuarios habituales, informa Efe. Ezker Batua reclamó la gratuidad total. Las peticiones se realizan debido a las obras de ampliación en este tramo, que se prolongarán durante dos años.

El juntero popular Iñigo Manrique incidió en que el pago del peaje tiene como contrapartida "un servicio de calidad y una seguridad que poco tienen que ver con retenciones, peajes saturados, desaparición del arcén o estrechamiento del límite de los carriles"].

Protesta en Rekalde

Los problemas de transporte se tratarán también en el pleno municipal de Bilbao de este mes, donde el PSE planteará una propuesta para aumentar la frecuencia de los recorridos de Bilbobus entre los barrios periféricos de Rekalde y Miribilla con el Hospital de Basurto. El portavoz socialista, Txema Oleaga, anunció además el apoyo de su grupo a la manifestación convocada hoy, a las 20.00, por la plataforma de Rekalde y que reivindica la llegada del metro, en contra de los planes del Ayuntamiento de implantar el tranvía en esta zona.

Oleaga pidió a los vecinos del resto de Bilbao que también se "solidaricen con estos ciudadanos, a los que el PNV, EA y EB [los tres socios del equipo de gobierno municipal] les niegan su derecho a contar con un transporte público de calidad, como el que tienen otros ciudadanos". Y acusó al alcalde Iñaki Azkuna de incumplir las promesas electorales de implantar el metro en este barrio. "Lo más grave no ha sido esto, sino que se ha doblado a los intereses del PNV".