CiU y PP piden que se paralicen las obras en El Prat

El número de vecinos que han denunciado la aparición de grietas en sus viviendas de El Prat próximas a las obras del AVE aumentaron ayer hasta los 22. Adif anunció que abrirá una oficina en El Prat para atender las consultas y las reclamaciones de los ciudadanos, y por la noche celebró una reunión con los vecinos de la que éstos salieron muy satisfechos. Adif se comprometió a poner marcas en las grietas actuales, inspeccionar todos y cada uno de los edificios entre la calle Anselm Clavé y las vías, y entregar copia de los informes a cada vecino. A la reunión asistió el alcalde de El Prat, Lluís Tejedor.

El optimismo de los vecinos contrasta con el negro panorama que dibujaron CiU y PP. Ambos coincidieron ayer a la misma hora y en el mismo emplazamiento de El Prat para realizar por separado una reclamación idéntica: que las obras del tren de alta velocidad se paralicen hasta que no haya total seguridad de que no provocarán daños en viviendas próximas, lo que implica también volver a revisar la conveniencia de su paso por el centro de Barcelona. O lo que es lo mismo: hacer imposible que se cumpla el calendario de llegada del AVE a Barcelona a finales de 2007.

CiU reclamará la comparecencia en el Parlament del consejero de Política Territorial, Joaquim Nadal, y del delegado del Gobierno, Joan Rangel, para que den explicaciones sobre cómo están actuando las administraciones en El Prat. El senador Pere Macias pidió una paralización preventiva de las obras para averiguar lo que ha ocurrido en el subsuelo. Cumplir el calendario ya no lo consideró prioritario: "Si los catalanes hemos estado 2007 años sin AVE podemos estarlo uno más". El senador añadió que "el interés en hacer las cosas con prisas sería un hecho político grave y denunciable". Después de lo sucedido en El Prat, comentó Macias, "será mucho más difícil hacer las cosas en Barcelona", y apuntó que su paso por el Eixample ya no tiene tanto sentido tras la anulación de la estación intermodal de Passeig de Gràcia. Macias fue el consejero que pactó el paso del AVE por el aeropuerto y El Prat.

El portavoz del PP en el Parlament, Francesc Vendrell, dijo que "es necesario parar las obras, hacer los estudios pertinentes y averiguar si se tienen que llevar a cabo de otra manera". Vendrell, que puso en cuestión el trazado por Barcelona, comentó que "la importancia de que el tren llegue en 2007 es menor a la de garantizar la tranquilidad de los vecinos".

La presidenta de la Asociación de Vecinos del Casco Antiguo, Rosario Amador, consideró que la presencia de Macias y Vendrell en El Prat se debió a su interés por "hacerse la foto".

El consejero de Interior, Joan Saura, respondió que no se contempla que miembros del Gobierno catalán comparezcan en el Parlament y que en la reunión del Gobierno celebrada ayer no se puso en ningún momento en cuestión el actual trazado del AVE por el centro de Barcelona. "El recorrido fue aprobado por PP y CiU cuando gobernaban en Madrid y Cataluña, respectivamente", recordó Saura. El consejero reclamó al Ministerio de Fomento "una respuesta urgente y rápida" para esclarecer el origen de las grietas.

El presidente de la Cámara de Comercio, Miquel Valls, exigió a Fomento que "resuelva los problemas técnicos para cumplir su compromiso y el tren llegue el 31 de diciembre a Barcelona, porque arrastra un retraso de demasiados años".