_
_
_
_
_

El Gobierno vasco pide a Zapatero iniciativas para desatascar el proceso del fin de ETA

La izquierda independentista considera que la situación está "a punto de naufragar"

El Gobierno vasco que preside Juan José Ibarretxe reclamó ayer al Ejecutivo socialista de José Luis Rodríguez Zapatero que tome iniciativas para evitar que el proceso para el fin del terrorismo etarra "continúe estancado" como se percibe en los últimos tiempos. También exigió el fin de la violencia callejera y pidió a Batasuna que se pronuncie contra la kale borroka. El Ejecutivo vasco hizo pública una declaración en la que comparte "la preocupación de la ciudadanía sobre cómo va el proceso, pero mantiene al mismo tiempo una sensación de esperanza".

Más información
Blázquez cree que el proceso de paz está "en penumbra" y expresa su deseo "ardiente" de que salga bien

Dirigentes de las organizaciones abertzales de izquierda opinaron ayer en una comparecencia conjunta que el proceso para el fin dialogado de la violencia de ETA está "a punto de naufragar". Acompañado de Arnaldo Otegi, Joseba Permach y otros dirigentes de la ilegalizada Batasuna, el portavoz de Askatasuna, Juan María Olano, afirmó que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "ha dinamitado los dos ejes que sustentan el proceso, el de los contenidos, y el que hace referencia a las reglas mínimas del diálogo multipartito".

Bajo la iniciativa de Askatasuna, el colectivo de apoyo a los presos de ETA, se convocó una movilización nacional en todas las localidades vascas para el próximo jueves día 20 de diciembre con el fin de exigir "condiciones democráticas para Euskal Herria".

Rodeado por los dirigentes que en los últimos meses, durante la tregua de la banda terrorista, han sido objeto de alguna actuación judicial o policial -Arnaldo Otegi, Joseba Permach, Pernando Barrena, Rufi Etxeberria o Joseba Alvarez, entre otros- el portavoz de Askatasuna, Juan María Olano, denunció la "represión" de la que ha sido objeto la izquierda radical.

"El balance en estos momentos es que existe una exclusión política, una exclusión territorial y una serie de mecanismos de imposición; en estas condiciones es imposible un diálogo multipartito", declaró Juan María Olano.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Hacía así referencia a las dificultades en que se está moviendo Batasuna como consecuencia de su ilegalización, un hecho que impide la constitución de la mesa de partidos y constituye el aspecto que genera mayor crispación para la continuidad del diálogo político.

Misma posición

El Gobierno socialista mantiene la misma posición que su presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, expresó el pasado Día de la Constitución, según fuentes gubernamentales. "El Gobierno mantiene las expectativas y los principios en el proceso de paz", dijo ese día Zapatero.

A este respecto, el Ejecutivo rechaza el "alarmismo" generado en algunos medios, tras las declaraciones del presidente de la Fundación Sabino Arana y ex dirigente y abogado de Batasuna Txema Montero, el pasado lunes, en las que especulaba con la posibilidad de que ETA anunciara la suspensión de la tregua en un plazo de dos semanas. La Fundación Sabino Arana, que preside Txema Montero, pertenece al ámbito del Partido Nacionalista Vasco. Montero se alejó de Batasuna hace casi dos décadas.

Fuentes del Gobierno precisaron ayer que la opinión de Montero, según admitió el presidente de la Fundación Sabino Arana, era un "análisis personal, sin fundamento informativo alguno". Montero hizo ayer esta precisión al presidente del PNV, Josu Jon Imaz, que, a su vez, habló con el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_