El declive de la cultura general
Es muy positivo que el debate sobre la violencia y la indisciplina en la escuela se haya instalado en la sociedad y que comiencen a hacerse propuestas para reconducir el problema. A este respecto no vendría mal revisar lo que la LOE dice sobre el derecho de los estudiantes a hacer huelga, no fuera a ser que a alguien se le ocurriera convertirlo, si no se ponen ciertos límites, en un derecho al motín y al cachondeo.
Tampoco vendría mal abordar otro gran problema de nuestro sistema educativo, que ha olvidado que su primer objetivo es conseguir que los adolescentes tengan eso que se llama cultura general y no el que titulen a toda costa para rellenar el currículo, y que ha llevado el debate a discutir con cuántos suspensos se pasa y no a qué hay que saber para pasar.
La degeneración de ese invento llamado evaluación continua ha compartimentado los conocimientos almacenados en la memoria de nuestros estudiantes en pequeños archivos que se vuelcan cada dos semanas en una hoja de examen sin hacer antes una copia de seguridad con el consiguiente resultado: examen aprobado, archivo eliminado. Francamente, resulta asombrosa la forma en la que nuestro sistema educativo infravalora el potencial de la mente humana. Eso sí, se empeña en que los alumnos reflexionen y razonen. ¿Sobre qué? ¿No será sobre el tema del examen de hace 15 días del que el alumno ya está liberado porque sacó un suficiente raspado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.