El estreno de "Miguel... ¿qué?"

"Hola, soy Miguel Sebastián. También conocido como Miguel... ¿qué? Próximo alcalde de Madrid". Con esa tarjeta de presentación, haciendo de la necesidad virtud, se plantó ayer en el instituto público Enrique Tierno Galván, en Usera, el candidato del PSOE a la alcaldía. Era su primer acto público, su zambullida en la precampaña electoral con seis meses de adelanto, y se lo tomó en serio: se hizo las fotos de rigor con el pulgar de la mano derecha alzado en señal de triunfo, estrechó manos, sonrió tímidamente a los adolescentes y no olvidó la crítica al PP. Denunció los problemas de los colegios públicos, aunque de sus propuestas para ponerles solución prefirió no hablar; eso, según sus colaboradores, llegará "más adelante".

Sebastián se limita por el momento a señalar problemas de la ciudad, sin proponer soluciones

El lugar elegido para el debut de Sebastián no era casual: "Ha llegado el momento de recuperar para Madrid la memoria de Tierno Galván", declaró al final del acto junto a la placa que rinde homenaje al ex alcalde socialista desde una de las paredes de ladrillo rojo del instituto. Antes de eso, el candidato se había dado un paseo por los pasillos del centro -atestados de chavales enardecidos por la visita-, había charlado con el director en su despacho, recorrido varias aulas de formación profesional y bromeado con los niños que se asomaban curiosos a las ventanas.

"¡Alcalde, alcalde!", gritaban unos tras preguntar por la identidad del misterioso visitante. "¡Presidente!", se aventuraban otros. "Fírmeme un autógrafo", "Haga que las calles estén más limpias", "Pasamos frío en la clase, mejore las instalaciones", se mezclaban las reivindicaciones al paso de la personalidad política, aún no autoridad municipal. Él decía que sí a todo, y mostraba un gesto de regocijo contenido cuando se oía nombrar por el cargo al que aspira. Luego, enseguida, recomponía su serio semblante y continuaba la marcha.

"Es muy tímido", justifican sus colaboradores. Ayer lo acompañaron el portavoz socialista en el Ayuntamiento, Óscar Iglesias, y los concejales Pedro Sánchez, Ramón Silva, Rafael Merino y José Contreras.

Los socialistas admiten que las competencias educativas no son responsabilidad del Ayuntamiento, sino de la Comunidad, pero aseguran que las carencias de los institutos no son sólo académicas, sino de seguridad y de mantenimiento de las instalaciones, y que ahí el gobierno municipal tiene mucho que hacer. "La educación es una preocupación de los ciudadanos, y además es inherente a la paz y la convivencia, y eso sí es competencia de un alcalde", afirmó Sebastián.

También quiso hacer un "anuncio": "Será una prioridad de mi gobierno que los colegios sean los lugares más seguros de la ciudad". Se le preguntó qué hará para lograrlo, y sólo respondió que habrá que "cooperar entre administraciones". Óscar Iglesias cogió el micrófono y le echó un capote: "Tiene que haber, por ejemplo, más agentes tutores, para evitar los trapicheos. En todo Usera no hay más que cuatro".

A mitad del paseo, tras declararse en voz baja impresionado porque muchos de los edificios por los que iba pasando la comitiva eran abiertos y vueltos a cerrar con llave -alguien le explicó también en voz baja que era necesario "para evitar robos"-, el candidato entabló su conversación más larga con los alumnos del taller de Climatización. Les preguntó qué tal se estudiaba y si les gustaba el profesor; ellos le pidieron mejores instalaciones; y, ya cuando se iba, alguno preguntó: "Pero ¿quién es?". Ahí es donde él se presentó: "Perdón... Hola, son Miguel Sebastián. También conocido como Miguel... ¿qué? Próximo alcalde de Madrid".

Hoy tiene su segundo acto público para convencer de eso a los madrileños. Hablará, en Vallecas, del precio de la vivienda.