"Nunca vi jugar a Carew como hoy"

Fue una noche irónica. Lo dijo Capello con un carraspeo misterioso: "Hay que ser irónico". Carew, que no había jugado en Liga de Campeones esta temporada y que había sido descartado por el Olympique, fue el hombre más relevante del partido. Cannavaro, que ha ganado el Balón de Oro, no pudo con Carew. Tampoco pudo Diarra decirle a Van Nistelrooy que no se le ocurriera tirar el penalti decisivo a la izquierda de Coupet, porque los paraba todos, como así sucedió. Coupet paró y el Madrid se quedó sin opciones de luchar por el primer puesto del grupo en la última jornada de la liguilla. Capello, cuyo equipo fue incapaz de dominar el partido, se marchó del campo con una sonrisa de satisfacción. Es más. Capello dijo que el Madrid le gustó porque no cualquiera le hace al Olympique lo que sus jugadores le hicieron: "Hasta hoy nadie le había metido un gol al Olympique en este torneo. Nosotros le hemos metido dos y le hemos podido meter tres si no fallábamos el penalti. No es fácil hacer lo que hemos hecho hoy ¿he?".

Capello disfruta de las situaciones difíciles. Otra cosa es que este Madrid le guste, como parece querer decir. El hombre se muerde la lengua y prefiere no hablar porque sabe que si dice la verdad sus declaraciones se volverán en contra suya. Con esta premisa, el técnico se escabulle por donde puede. "Creo que hemos visto un gran partido", dijo ayer. "Hemos tenido la oportunidad de ganar, pero hemos fallado el penalti [lanzado por Van Nistelrooy]. El Lyon ha jugado un partido destacado. Es un equipo que juega la Liga francesa y puede dar descanso a sus jugadores. En la última jornada dio descanso a tres. Así compite tranquilamente en Francia pensando en la Champions. Es un equipo cuadrado".

La actuación de Carew asombró al entrenador madridista. Durante su etapa en el Roma, Capello fichó a Carew pero no le dio demasiados minutos. Ayer el técnico no daba crédito. Cuando le preguntaron por la oportunidad de dar la titularidad a Cannavaro, que sufría molestias musculares, replicó ensalzando al delantero sueco: "Hoy no ha sido un problema de Cannavaro. Cualquier defensa habría tenido problemas para marcar a Carew. Lo tuve en el Roma y nunca lo vi jugar como hoy. Si hoy había un ojeador mirando el partido seguro que vio a John Carew y pensó: 'Éste es un gran jugador".

Carew nunca fue considerado un delantero de la primera línea. Hasta ayer. La exaltación de Carew prosiguió con Capello describiendo la forma de pegarle a la pelota de Juninho Pernambucano: "¡Le pega tan bien al balón que no se sabe si sube o si baja! Mis jugadores me decían '¡Nadie le pega al balón así desde los 35 metros!".

Además de reclamar fuera de juego de Carew en el primer gol del Lyon, Capello no hizo más declaraciones sobre el partido. Carew sí: "Estoy orgulloso de haber jugado tan bien contra futbolistas tan buenos como Cannavaro, el Balón de Oro. Hoy tenía buen feeling. Me salían las cosas. Agradezco a Capello sus elogios. Muchas gracias, Fabio". "Carew", apuntó Cris; "fue fundamental porque permitió a todo el equipo salir al ataque. Sabe proteger la pelota. Los defensas del Madrid intentaban quitársela pero chocaban contra su espalda. Así, siempre cogíamos descolocada a su defensa".

Diarra lamentó sus carencias idiomáticas. El maliense admitió que sabía que Coupet, ex compañero en el Olympique, paraba los balones que le tiraban a la izquierda, pero que no pudo avisarle a Van Nistelrooy de este detalle cuando fue a tirar el penalti. "¡Abajo y a su izquierda los para todos!", decía Diarra. "¡Pero yo no sé holandés y no le pude avisar a Ruud!". La falta de comunicación impidió al Madrid ganar el partido, empatar a puntos con el Olympique, y jugarse la primera plaza en la última jornada el 6 de diciembre.