El río Júcar se queda seco entre Antella y Carcaixent
La plataforma ecologista Xúquer Viu denunció ayer que el cauce del río Júcar se encuentra "prácticamente seco" en el tramo de unos 15 kilómetros que media entre las localidades de Antella y Carcaixent y reclamó un plan de sequía que tenga en cuenta "las necesidades mínimas de este río", es decir, un plan que mantenga el cauce ecológico del río: los aportes mínimos para permitir la pervivencia de la fauna y flora fluviales.
El portavoz de los ecologistas de Xúquer Viu, Francisco Sanz calificó ayer de "dramática" la situación del Júcar. Y lo hizo desde el lecho de este río en un paraje del término de Alberic. Allí advirtió de que al segundo río más importante de la cuenca mediterránea española está a punto de convertirse "en un Segura", es decir un río casi desahuciado.
Los dirigentes de esta plataforma consideran que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) "no ha tenido en cuenta, en la planificación realizada, las necesidades medioambientales que requería" y reclaman que contemple esas necesidades mínimas en el próximo plan de sequía.
Xúquer Viu ha criticado la excesiva concesión realizada para el riego de "los cultivos poco productivos de la Mancha, que consumieron cerca de 400 hectómetros cúbicos".
Francisco Sanz avisó de que la degradación que está sufriendo el río se está convirtiendo en "un problema sanitario y económico" para la comarca de la Ribera.
Vertidos contaminantes
El escaso caudal de agua que lleva el Júcar desde Carcaixent y Alzira hasta la desembocadura, unido a los vertidos contaminantes de alguna industria causaron, recientemente, la muerte a millares de peces en la zona baja del río. Algunos alcaldes de La Ribera Baixa se han quejado estos días del pestilente hedor que emana de las aguas contaminadas de un río convertido, poco menos que en una cloaca.
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