Grupos antirracistas piden al Gobierno mayor rigor contra los actos neonazis

Varias organizaciones antirracistas reclaman al Gobierno que impida de ahora en adelante la celebración de actos como el que tuvo lugar el pasado sábado en un polígono industrial de Guadalajara. Un colectivo autodenominado Unidad Skinhead organizó allí el Iberian Fest, un festival neonazi en el que participaron grupos como Brutal Attack, vinculado a la organización inglesa Blood and Honour. La rama española de esta organización fue desarticulada por la Guardia Civil en abril del año pasado.

"En estos conciertos se promueve el odio racial y se adoctrina a los asistentes con ideas de la derecha más extrema", señala Esteban Ibarra, presidente del Movimiento contra la Intolerancia, "y las fuerzas del orden se limitan a pedir la identificación a algunos asistentes". Por esta razón la asociación representada por Ibarra se ha reunido con la subdelegada del Gobierno en Madrid, Soledad Mestre, para pedirle mayor contundencia de las instituciones del Estado frente a este tipo de actos. En concreto, demandaron una aplicación más rigurosa del artículo 510 del Código Penal, que castiga con penas de prisión de uno a tres años la incitación a la violencia o al odio racial. Según Ibarra, la respuesta que recibió fue positiva.

Al concierto de Guadalajara acudieron unos 150 cabezas rapadas procedentes de Madrid y de Castilla y León, y se organizó en secreto para tratar de eludir la vigilancia de las fuerzas de seguridad. Los datos de la convocatoria sólo eran accesibles a través de determinadas webs y foros de Internet. "Internet es el principal vehículo que usan los neonazis para difundir su música y sus ideas", alerta Ibarra. De hecho, ayer aún podía verse el cartel del Iberian Fest en la web inglesa de Blood and Honour.

Además del Movimiento contra la Intolerancia, otras organizaciones como la Coordinadora Antifascista también han protestado en varios comunicados por la celebración del concierto.