Vecinos de Roquetas dicen que el parte del Gran Plaza está en suelo industrial
Una plataforma denuncia supuestas irregularidades urbanísticas
El portavoz del colectivo Manos Limpias en el Urbanismo de Roquetas, Francisco Hurtado, afirmó ayer que parte de la zona (sector 36) sobre la que asienta el centro comercial Gran Plaza, en Roquetas de Mar (Almería), es de uso industrial. El sector contiguo, el 35, donde está ubicado el comercio Leroy Merlin y una gasolinera, está catalogado como rústico, según la misma organización.
Hurtado denunció, además, que en el sector 36 se ha construido hasta "tres veces más" de lo permitido al elevar un muro que camufla el garaje para que esta planta no computara como suelo. El Ayuntamiento vendió el aprovechamiento medio a Gran Plaza y, a juicio de Hurtado, "eso significa que ahora los roqueteros le deben a Tomás Olivo, propietario de Gran Plaza, 9.000 unidades de aprovechamiento de un sector que no existe. Y, desgraciadamente, esto está en documento público en el registro de la propiedad. El Ayuntamiento de Roquetas ha mentido presuntamente en documento público", aseguró el portavoz de la plataforma vecinal.
Se da la circunstancia, además, de que la Consejería de Obras Públicas anuló el 29 de enero de 2003 el acuerdo plenario relativo al plan parcial. Pero su nulidad no impidió que en un documento público fechado ocho meses más tarde se constatara lo siguiente: "En la escritura que se inscribe, comparece el señor concejal delegado de Urbanismo del excelentísimo Ayuntamiento de Roquetas de Mar, don José María González Fernández, facultado por la resolución que se dirá dónde se tomó el acuerdo de aprobación del proyecto, al objeto de protocolizar el proyecto de compensación urbanística que es objeto de este asiento (...)". Para el colectivo Manos Limpias la escritura demuestra que se mintió en documento público. "Para que un sector sea urbanizable tiene que crearse una junta de compensación y hacerse un plan parcial y llevarse al registro de la propiedad con ese acuerdo plenario. El acuerdo plenario no existe y, por lo tanto, se ha manipulado la verdad en el registro de la propiedad", denuncia Hurtado. "Fueron conscientes de que tenían anulado el acuerdo por Obras Públicas cuando fueron a registrar el documento", añadió.
Hurtado denunció también que el Plan General de Ordenación Urbana que se tramita en la actualidad recoge una modificación puntual que pretende aunar ambos sectores y catalogarlos a uso comercial e industrial.
"Y ahora quieren que se destine a uso industrial y comercial ambos sectores. Si ahora van pedir la unidad de los dos sectores ¿qué había antes? ¿Cómo se puede inscribir en el registro de la propiedad la unidad de aprovechamiento de una finca que hoy, en la actualidad, es rústica? ¿Quién ha mentido en el registro? Quiero entender que Gabriel Amat ha sido un mal gestor", remachó el portavoz.
Este periódico publicó días atrás que el sector donde se asienta la mayor parte del Gran Plaza, el sector 36, contaba con un aprovechamiento lucrativo de 32.900 metros cuadrados y una edificabilidad del 0.50. Sólo podrían construirse 37.000 metros y unos 36.000 estaban destinados a viarios o calles. El 10% del aprovechamiento medio correspondía al Ayuntamiento, que lo vendió a General de Galerías Comerciales, SA, por 450.000 euros. Manos Limpias denuncia ahora que la venta del aprovechamiento medio se hizo "casi al mismo precio que Miguel Pintor, cuñado del alcalde y presidente de la empresa Inmaculada Algaida, SL, vendió el terreno donde se asiente el Gran Plaza a Tomás Olivo".
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