Más de un centenar de dibujos inéditos revelan el aspecto más íntimo de Lipchitz
La muestra de Bilbao recorre todas las etapas del trabajo creativo del escultor lituano
Un total de 115 dibujos y una plancha de grabado de cobre muestran desde ayer y hasta el próximo 30 de noviembre "lo más personal e íntimo" del escultor Jacques Lipchitz (Druskininkai, Lituania, 1891; Capri, Italia, 1973). La sala de la Fundación BBK en Bilbao (Gran Vía, 30) muestra estos trabajos que fueron, en algunos casos, el preludio a la realización de esculturas y, en otros, reflexiones y ejercicios sobre papel. Gracias a estas piezas, recuperadas de una carpeta que contenía cerca de 300 dibujos, la exposición, que ha comisariado Kosme de Barañano, permite seguir el proceso de creación de obras como Prometeo estrangulando al buitre o El rapto de Europa.
La carpeta de dibujos, en manos de la viuda del escultor desde su fallecimiento, fue encontrada por sus hijos a comienzos de este año. Barañano, quien trabaja en un catálogo razonado de la obra de Lipchitz y se halla en contacto continuo con la familia, se ha encargado de la selección, "primero, en función del tamaño de la sala", según indicó ayer en la presentación de la muestra, y luego, para que "dentro de la dificultad de la didáctica en el arte, se vea el proceso de Lipchitz en la realización de sus esculturas". El comisario incide en que en los conjuntos de dibujos para una misma pieza, que se muestran agrupados, se aprecia cómo a veces los retoques de Lipzhitz eran mínimos, de detalle.
El catálogo de la muestra recalca que se ha optado por una selección que refleje "tanto sus diversas etapas vitales como los diversos modos de dibujar, sean ideas rápidas o sean dibujos de prefigurar una escultura, como las formas de llegar a una imagen gráfica, la forma de llevar a cabo sus aguafuertes". Los dibujos se exponen por primera vez, a excepción de seis imágenes mostradas a principios de año en el Museo de Boston.
Interacción de formas, título de la exhibición, enseña así "lo más personal, el dibujo íntimo" del artista lituano, según comentó Barañano. Entre las obras que destacó se encuentra el dibujo del joven Flautista, una temática abordada por Lipchitz desde su juventud hasta el final de sus días. También figura el dibujo de Ploumenack, realizado en la parte trasera de un programa de música y danza, que "muestra a Lipchitz como uno de los descubridores del paisaje pétreo, escultórico, de la costa de Bretaña en 1926". Otro dibujo está realizado sobre un trozo de periódico, en concreto sobre una fotografía del New York Times del 9 de marzo de 1945, en la que el autor dibujó con tinta una especie de mujer suplicante, al estilo del Guernica de Picasso.
La exposición incluye, además, una plancha de cobre, trabajada con aguafuerte, con dos estampaciones o dos estados del proceso de grabado. De otro aguafuerte se han elegido ocho estampas diferentes, dos de ellas sólo con la presión de la plancha sin tinta alguna, en la línea de los grabados en seco que Eduardo Chillida realizaría años después, y seis con diversos estados tanto en tinta como en imagen.
Con Picasso
También se presentan en Bilbao, entre otros, dibujos de corte cubista y a la vez figurativo descriptivo, dibujos terminados y otros "de investigación", así como algunos elaborados en carboncillos o en lápices de cera de colores.
Barañano comentó que la obra de Lipchitz, considerado uno de los grandes escultores del siglo XX, está presente en casi todos los museos del mundo y ha sido comentada internacionalmente por los principales estudiosos del arte y por los más prestigiosos directores de museos. El artista, indicó, compartió inquietudes y proyectos con Picasso y Braque, lo que puede apreciarse en la muestra, y, junto con Henri Laurens, fue uno de los autores que formuló las bases del vocabulario cubista en la escultura.
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