Tres sindicatos de la UPV preparan nuevas protestas contra el pacto salarial
Los sindicatos mayoritarios en la Universidad del País Vasco (CCOO, UGT y CSI-CSIF) anunciaron ayer que seguirán realizando medidas de presión contra el acuerdo sobre los complementos salariales firmado en julio por el Rectorado, Educación y las centrales minoritarias LAB y STEE-EILAS. Los sindicatos no firmantes, que representan al 55% del profesorado, han convocado asambleas entre el 18 y 20 de octubre como paso previo a posibles movilizaciones.
En una rueda de prensa reiteraron su rechazo a un acuerdo que "no dignifica el salario de los profesores". Para Jesús María Guzmán, delegado de CSI-CSIF, la fórmula pactada mantiene "una discriminación inadmisible" respecto al profesorado de secundaria. Los sindicatos no firmantes han destacado que el acuerdo se mantiene lejos de los 6.000 euros que reivindicaban.
Gonzalo Maestro, delegado sindical de CC OO, subrayó que los complementos salariales, lejos de ser generales, no serán percibidos por los 300 profesores con menos de tres años de antigüedad. Agregó que otros 500 docentes que ya cobraban según el sistema anterior se ven en la "situación de riesgo" de ver reducido su salario.
Maestro destacó asimismo que su concesión no es automática, sino que está supeditada al reconocimiento de méritos en docencia, investigación y gestión, lo que perjudica a aquellos docentes que no pueden inscribirse en programas de investigación. Los sindicatos que se oponen al acuerdo han incidido en que, "pese a las prisas del Gobierno vasco" por cerrar le negociación, todavía no ha aprobado el decreto que debe oficializar los complementos. Por ello, anunciaron que seguirán presionando para solucionar los problemas que el borrador del decreto deja aún pendientes.
El titular de Educación, Tontxu Campos, declaró el miércoles que el acuerdo firmado es "difícilmente mejorable" y defendió que el decreto que se aprobará será "el mejor" de toda España. Campos invitó a los sindicatos contrarios al acuerdo a que "llamen a la puerta de Madrid", porque es el Estado quien fija las retribuciones básicas del profesorado.
