BLOC ELECTORAL

Majó acaba con el minutaje en la información electoral en la televisión y la radio públicasEl Consejo de Administración de la Corporación Catalana de Radio y Televisión aprobó ayer, con los votos en contra de CiU y la abstención del PP, la propuesta de su director general, Joan Majó, para establecer criterios informativos, y no por cuotas de representación parlamentaria, en la cobertura de la campaña electoral de las elecciones autonómicas del 1-N. El número de escaños obtenidos por cada formación en los comicios de 2003 se usará para establecer el orden de intervención de los candidatos en los debates, mientras que el número de votos determinará el orden de las entrevistas. CiU anunció ayer que recurrirá contra esta decisión ante la Junta Electoral Central.

Un total de 13 formaciones políticas presenta candidatura en las cuatro provincias catalanas en las elecciones autonómicas del 1 de noviembre, mientras que otras 10 lo harán en alguna de estas circunscripciones. Suman 70 candidaturas. En 2003 concurrieron 63 listas.

70 candidaturas concurren a las elecciones del 1-N

El líder ecosocialista Joan Saura anunció ayer su intención de promover la construcción de 60.000 viviendas de protección oficial en caso de mantenerse en el Gobierno después del 1 de noviembre. La mitad serán en alquiler y estarán destinadas preferentemente a la tercera edad, los jóvenes y sectores excluidos. El dirigente de ICV también se comprometió a dar luz verde a la ley de la vivienda, paralizada en el Parlamento catalán por el adelanto electoral.

Saura promete 60.000 viviendas de protección oficial

Los obispos catalanes definieron ayer los criterios que tanto el elector católico como el conjunto de los votantes deberían seguir a la hora de elegir el partido al que votará el 1-N. La Conferencia Episcopal Catalana recomendó que los catalanes tuvieran en cuenta las formaciones que defienden el derecho a la vida, el matrimonio entre hombre y mujer, la libertad de los padres en la educación de sus hijos, la justicia social y la cultura de la paz.

Los obispos invitan a votar con criterios católicos

Convergència i Unió (CiU) y el Partit dels Socialistes (PSC) continuaron ayer enfrascados en un rifirrafe sobre el formato de los cara a cara televisados que deben mantener sus respectivos candidatos. Los convergentes aceptarían ampliar el número de debates sectoriales, pero se niegan a que el primero se emita en castellano para toda España.

CiU y el PSC continúan sin acuerdo sobre los debates electorales entre Mas y Montilla