Carod y Puigcercós aparcan diferencias y se declaran "pareja de hecho política" ante la militancia de ERC

Los dos principales dirigentes de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Josep Lluís Carod Rovira y Joan Puigcercós, quisieron mostrar ayer que en su partido no hay discrepancias y mucho menos entre ellos. "Somos pareja de hecho política", afirmó ayer el presidente de Esquerra Republicana, Josep Lluís Carod Rovira. Ambos cerraron la convención nacional de dirigentes que el partido celebró en el teatro de La Passió de Esparreguera (Baix Llobregat), a la que asistieron un millar de personas, con sendos discursos en los que no escatimaron tiempo ni palabras en alabar la carrera y la altura política del otro, en una demostración explícita de que ERC no está dividida.

"Juntos hacemos una piña que otros no tienen, porque van a piñas", afirmó Carod. El candidato a la presidencia de la Generalitat ensalzó que Puigcercós aceptara ir de número dos en las listas al Parlament detrás de él, abandonando el liderazgo del partido en el Congreso de los Diputados. "Fue un gesto de patriota que quiero reconocer públicamente", dijo Carod. El presidente de los republicanos explicó a su vez que tomó en 1996 la dirección porque "sabía que Puigcercós estaba al lado". Por su parte, Puigcercós alabó el papel del presidente de ERC, que marcó su nuevo ideario hace 20 años.

En su discurso, Carod se dirigió a la militancia para pedirle "un cambio de chip y de mentalidad" para poder seguir la nueva estrategia que se ha marcado el partido: crecer mediante su acercamiento a todo el electorado catalanista y no sólo el independentista, una aspiración que se disputa con Convergència i Unió. "Queremos ir más lejos", y captar a simpatizantes "desde el centro hasta la izquierda". En este sentido, afirmó: "hay muchos catalanistas que son de los nuestros y aún no lo saben". Presidente y secretario general reconocieron que ERC ha escuchado tradicionalmente a la militancia y subrayaron que con los actos sectoriales que ha organizado el partido, ahora también "hemos podido escuchar a los votantes". Para ello reclamaron la ayuda de los afiliados, para que expliquen el programa electoral a los simpatizantes con el fin de alcanzar los 700.000 votos en las próximas elecciones al Parlament.

Carod atacó a la "España plural" que propugna Zapatero. "No se la cree nadie", dijo, enumerando las actuaciones de los últimos días del Defensor del Pueblo contra el Estatuto y el recurso de inconstitucionalidad del Gobierno del PSOE contra la ley del audiovisual. Carod aseguró que si el Tribunal Constitucional no archiva el recurso presentado contra el texto estatutario Cataluña no podrá confiar en las instituciones democráticas. "España nos quiere para pagar y callar. Algunos ya estamos hartos", sentenció.

Mas, candidato del PSOE

Puigcercós posicionó ERC como el único partido que no depende de Madrid, al contrario que las opciones que representan José Montilla y Artur Mas. Habló de este último como "el candidato oficial del PSOE", una afirmación que recibió las sonrisas del auditorio del teatro. Al mismo tiempo, apuntó hacia la posibilidad de un pacto CiU-PP. "A Mas no le cuesta ir a Madrid, donde pactó muy mal el Estatuto", señaló. "Ahora dice que aceptará los votos del PP a cambio de nada. Pero Piqué no trabajará gratis".

La convención de dirigentes celebrada ayer sirvió para ratificar el programa electoral de la formación. Uno de sus ejes principales es el máximo despliegue del nuevo Estatuto. Sin embargo, la formación no dejó de criticar que el texto en vigor desde el mes de agosto se ha quedado "corto" frente a las necesidades competenciales de Cataluña, algo que a su parecer se ha puesto de manifiesto este mismo verano, con el mal funcionamiento del aeropuerto, Renfe, el flujo de inmigración y de las adopciones del Congo. Otra de las prioridades de ERC será el desarrollo del Pacto del Tinell, en especial del Pacto para la Competitividad, la Ley de Barrios y el Pacto Nacional de Educación. ERC también apuesta por el impulso de la cultura y su exportación a otros continentes; dotar a todas las comarcas de los servicios y prestaciones necesaria; reducir las listas de espera, y multiplicar por 10 la atención domiciliaria.