CC OO denuncia la campaña amarillista sobre violencia escolar para endurecer la ley del menor

El sindicato CC OO denunció ayer la existencia de una campaña "amarillista", a raíz de la presentación del estudio Violencia y acoso escolar de la Universidad Alcalá de Henares, con la finalidad de "forzar cambios para endurecer la Ley del Menor y rebajar la edad de aplicación de la ley", lo que afectaría a los estudiantes de secundaria más conflictivos. Manolo Picó, secretario general de la federación de enseñanza valenciana, lamentó la "visión sensacionalista" y los "alarmantes resultados, plagados de titulares mediáticos" del estudio, y abogó por "abrir un proceso de negociación entre todas las partes implicadas (Administración, familias y escuela) para consensuar y sentar las bases de actuación de una problemática", que negó tajante que exista de la manera generalizada.

El Consejo Escolar critica a la Universidad de Alcalá y dice que "el acoso es excepcional"

"Sería un error decir que aquí no pasa nada", agregó Miguel Á. Vera, secretario de Acción Sindical de CC OO, pero advirtió: "Hoy son los niños los que están muriendo a manos de adultos, no a la inversa", dijo citando como ejemplo "el caso de la niña encontrada degollada hace dos días a manos de la ex pareja de su madre". "No hay violencia escolar, lo que hay es violencia en la sociedad", y los centros escolares se encuentran afectados por problemas específicos, delimitados por zonas o barrios.

De hecho, Picó y Vera apelaron a los resultados del último estudio realizado entre el conjunto del profesorado de España, encargado por CC OO, hace tres años en el que la conclusión más acusada fue -pese a reconocer en proporciones menores casos de violencia verbal o física- que los docentes ya alertaban de que el mayor grado de absentismo y falta de disciplina se daba entre los escolares de clase media.

En esa dirección, CC OO considera que para que "los profesores puedan impartir sus clases en condiciones y los alumnos asistan motivados, es necesaria la participación de todos los agentes que intervienen en la educación". Cosa que no ha hecho la Consejería de Educación valenciana -que ayer presentó su enésima versión del Plan PREVI- "sin contar con nadie" y sin "ofrecer ningún diagnóstico sobre la situación". Según Picó, "la consejería ha secuestrado el debate a toda la comunidad educativa, incluido el Consejo Escolar Valenciano".

El Consejo rechazó el lunes "las informaciones que han contribuido a sembrar alarma social, ofreciendo un panorama de violencia generalizada entre nuestros alumnos", en referencia al estudio de la Universidad de Alcalá. El Consejo sostiene que "el acoso escolar es excepcional", y que estos estudios "sólo contribuyen a dar una imagen deformada de los centros educativos". "La falta de disciplina es responsabilidad de la familia, la escuela y la sociedad. Es necesario impulsar políticas que favorezcan la convivencia y el rechazo a la discriminación social excluyente".