Zapatero arremete contra Mas por sus pactos con la "extrema derecha"

En la que fue la primera aparición de José Luis Rodríguez Zapatero en la precampaña electoral catalana, el presidente del Gobierno intentó dejar claro ayer que, pese a la creciente sintonía de su partido con Convergència i Unió en el Congreso, los nacionalistas han sido, son y serán sus rivales a batir en Cataluña. Y no habrá contemplaciones.

Así, Zapatero no dudó en arremeter por tierra mar y aire contra el candidato nacionalista, Artur Mas, a quien definió como un político "de márketing", a falta de un programa social, y con ganas de repetir sus pactos con "la nueva extrema derecha" que a su juicio representa el Partido Popular.

Zapatero marcó así distancias con un Artur Mas que periódicamente le lanza mensajes de apoyo con el objetivo de ningunear a los socialistas catalanes y muy concretamente a Pasqual Maragall y al candidato del PSC a la Generalitat, José Montilla. El presidente del Gobierno aseguró que no se cree las promesas de Convergència i Unió de no pactar con el PP para hacerse con la Generalitat.

"Puede decir CiU lo que quiera, pero tendremos que ver qué hará después de todo el tiempo que estuvo con el PP", dijo Zapatero, quien presentó a Montilla como la "vacuna contra esa nueva extrema derecha y la derecha". Además, llamó la atención sobre el hecho de que esa "nueva extrema derecha haya atacado sin descanso y con todas sus armas a Montilla", y, sin embargo, "no ataque al principal rival de Montilla", en referencia a Artur Mas.

Inversiones y aeropuerto

La presencia de Zapatero ayer en la Fiesta de la Rosa del PSC en Gavà, impulsada por la poderosa federación del Baix Llobregat, a la que pertenece José Montilla, supuso un espaldarazo a unos socialistas catalanes que se encuentran a cuatro puntos de CiU en intención de voto según varias encuestas. Para movilizar a su gente, Zapatero y Montilla no dudaron en reafirmarse en sus promesas ya conocidas y en lanzar otras nuevas.

Entre las últimas, Zapatero garantizó que la Generalitat tendrá un "papel determinante" en el consorcio que gestionará el aeropuerto de El Prat. También prometió que esta semana Cataluña verá cómo el Gobierno cumple con el compromiso estatutario de invertir en Cataluña el 18,85% del total de las inversiones del Estado en infraestructuras. Montilla concretó que la cifra global de inversión del Estado en Cataluña para 2007 será superior a la invertida en los cuatro primeros años de Gobierno de José María Aznar con el apoyo de CiU. Sin avanzar cifras, Zapatero y Montilla aseguraron que los catalanes verán esta misma semana "otra promesa cumplida".

Pasqual Maragall también asistió a la fiesta, a la que llegó con 40 minutos de retraso y de la que se ausentó antes de la intervención de Zapatero argumentando, en público, que sus nietos le estaban esperando para asistir a la jornada castellera de las fiestas de Barcelona.