Descenso esperado

Los inversores han dado por buenos los beneficios acumulados a lo largo de la semana y la sesión de cierre se ha dedicado a hacer caja. Dentro de un proceso que ha estado muy extendido en cuanto a mercados y sectores, algunos observadores dedicaron la sesión a efectuar una especie de "test de solvencia" en el que puntuaban casi por igual la cantidad de papel puesta a la venta y la presencia de compradores.

La Bolsa española ha salido bien librada, en conjunto, de esta prueba, pues el Ibex 35 ha sido el índice menos castigado por los recortes al terminar la sesión con un descenso del 0,70%, frente a las bajadas de más del 1% del resto de los grandes mercados de valores. Sólo la Bolsa de Nueva York, últimamente muy moderada en todas sus reacciones, mantenía un comportamiento menos negativo en su apertura.

La pérdida del nivel de los 12.400 puntos por parte del principal índice del mercado de valores español, cuando un día antes había tocado los 12.500 puntos, fue considerada como algo lógico por la mayoría de los inversores, sobre todo teniendo en cuenta las ganancias acumuladas en los últimos días.

El sector inmobiliario consiguió mantener todavía el interés de los inversores, fundamentalmente en Metrovacesa, valor en el que la inversión a corto ve algunas probabilidades de obtener mayores beneficios. Los grandes valores del Ibex 35 resultaron razonablemente castigados, con recortes que casi siempre superaron el 1%, pero esas pérdidas se vieron compensadas, en el conjunto del mercado, por el buen comportamiento de los valores medianos, cuyo índice cedió tan sólo el 0,19%.

En el conjunto de la semana el Ibex 35 gana el 0,90% y deja la puerta abierta a todo tipo de opciones.

La contratación en el Mercado Continuo mostró el desinterés de los inversores con un descenso hasta los 3.226,90 millones de euros.