Alicia Alonso: "Que desaparezca el Albéniz es una mala noticia"
De La Habana a Madrid pasando por Londres, El Cairo y Alejandría. El Ballet Nacional de Cuba (BNC) hace escala esta noche en el Teatro Albéniz dentro de una gira que les lleva por distintos escenarios del mundo y que no sólo no cansa, sino que llena de energía y de ilusión a la capitana del barco dancístico: Alicia Alonso. "Venir a Madrid nos pone siempre muy contentos. Hemos estado aquí ya una docena de veces, y creo que hemos hecho una labor muy bonita con el público madrileño: ayudar a estimular el amor por el ballet clásico", explicó ayer la directora del Ballet de Cuba.
A propósito del riesgo de desaparición de un foco de artes escénicas emblemático como el Albéniz, con la espada de Damocles de la amenaza inmobiliaria, Alicia Alonso lo tiene claro: "Que desaparezca un teatro es una mala noticia. Los teatros son los pulmones de la cultura de un país".
Hoy mismo, Alicia Alonso y su compañía presentan en el Albéniz el programa que les mantendrá en Madrid hasta la primera semana de octubre. Del 21 al 24 de septiembre, un clásico del repertorio del Ballet Nacional de Cuba: El lago de los cisnes. Del 27 de septiembre al 1 de octubre estará en cartel Giselle, "muy marcado por el romanticismo". Del 4 al 8 de octubre, la Gala coreográfica Alicia Alonso, un compendio de piezas en las que la directora ha querido combinar el estilo clásico y el contemporáneo, aderezado con sentido del humor.
Y "habrá dos estrenos europeos". Uno, la revisión del ballet La flauta mágica, y otro, una interpretación de la partitura para piano del compositor catalán Joan Guinjoan, titulada Verbum. El músico explora el fragmento de la secuencia del genoma humano asociado al habla y la coreógrafa cubana se ha lanzado a crear "una forma de baile descompuesta, en la que mezcla "lo clásico y el break dance", las puntas y los pies descalzos. Todo ello con sello cubano: "Cuando se abre el telón ya se ve la personalidad de la compañía", dice orgullosa Alonso. La bailarina, que en 2005 recibió en La Habana un homenaje por su 85 cumpleaños, llenará de danza tres teatros de la capital cubana a finales de octubre, con un festival internacional dedicado a Mozart. El presidente Fidel irá, "si su salud se lo permite".
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